Hace un año, la noche del 9 de febrero de 2023, un grupo de agentes de la Guardia Civil fueron enviados al puerto de Barbate (Cádiz) para tratar de sacar del mismo a un grupo de narcolanchas que se protegían en su interior de la borrasca Karlotta. Se les envió sin los medios necesarios para realizar su actuación y la consecuencia de ello fue que los narcos asesinaron a dos de estos guardias civiles.
Doce meses después, se han organizado tres actos en homenaje y recuerdo de los dos agentes a los que quitaron la vida en aquella trágica noche: Miguel Ángel González y David Pérez. El primero de ellos tendrá lugar mañana viernes en Barbate y se ha convocado a las 9.00 horas a las puertas del ayuntamiento de la localidad gaditana para guardar un respetuoso minuto de silencio.
El segundo acto-homenaje tendrá lugar también el viernes, pero a las 12.30 horas y en la ciudad de Cádiz. Exactamente, frente a la Comandancia de la Guardia Civil, desde donde se dio la orden a los agentes que acudir al puerto de Barbate pese a no tener los medios suficientes para realizar la actuación con seguridad. La misma estará presidida por una pancarta con el lema "Sin medios, sin apoyos... ¡Nunca más!".
El último acto en recuerdo de los agentes será el domingo, coincidiendo con la trágica efeméride, y será en el puerto de Barbate, en lugar donde fueron asesinados los dos agentes. Está previsto que se realice una ofrenda floral. Los tres actos están organizados por "Nuestro Corazón por Bandera", una asociación integrada por familiares de guardias civiles.
Este jueves, a primera hora de la mañana, los agentes destinados en la provincia de Cádiz han sido informados de que la Dirección General de la Guardia Civil, que depende del Ministerio del Interior de Fernando Grande Marlaska, no ha autorizado que los agentes que quieran acudir a estos actos de homenaje puedan hacerlo vistiendo el uniforme del cuerpo. Un hecho que ha sentado mal en buena parte del Instituto Armado.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha asegurado que "esta orden es una falta de respeto intolerable hacia quienes dieron su vida en acto de servicio. Es incomprensible que el mismo uniforme que vestían cuando fueron brutalmente asesinados ahora sea censurado en un acto de recuerdo y dignidad. Esta medida solo alimenta el sentimiento de abandono que sufre la Guardia Civil".
"Desde AUGC exigimos explicaciones urgentes de quienes han tomado esta decisión. Bien es verdad que es necesario autorización para usar el uniforme en estos actos, pero nos parece denigrante que en gran multitud de actos ajenos a la Guardia Civil se use el uniforme y ahora para conmemorar los asesinatos de nuestros compañeros no se pueda", han añadido desde la asociación.
En parecidos términos se ha expresado la la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha denunciado que la Dirección General y el Ministerio de Interior, "agarrándose al clavo de la normativa, impiden homenajearlos y recordarlos como se merecen, luciendo con orgullo nuestro uniforme".
"No entendemos porqué sí se puede hacer uso del uniforme en actos que nada tiene que ver con la Guardia Civil, se ordena asistir de uniforme a los compañeros de servicio en diversos actos y en cambio, para homenajear a los dos guardias civiles asesinados que dieron su vida en acto de servicio, no", han lamentado la AEGC.