Yad Vahshem exige a Vueling una "investigación seria": "No ha aportado ni una prueba"

Yad Vashem España, la representación en nuestro país del centro Yad Vashem de Jerusalén, que es la mayor institución del mundo dedicada a preservar la memoria del Holocausto –y que ganó el Premio Princesa de Asturias a la Concordia en 2007– ha emitido este sábado un comunicado sobre la expulsión de un grupo de jóvenes judíos de un avión de Vueling.

El centro es muy duro con la compañía aérea, a la que exige "una investigación seria, transparente y sin prejuicios". Además, señala que es "inaceptable" que Vueling haya emitido "conclusiones precipitadas" en dos comunicados públicos sin escuchar los testimonios de los jóvenes afectados y también los de otros pasajeros que "han asegurado públicamente que los jóvenes se comportaron de manera cívica y tranquila".

El comunicado recuerda que "los adolescentes portaban símbolos religiosos judíos visibles, como kipás", lo que "genera serias sospechas sobre la motivación real" de las decisiones tomadas por el personal del vuelo.

Otro aspecto muy interesante del texto es que recuerda que "la compañía aún no ha aportado ni una sola prueba que respalde su versión de los hechos", algo muy llamativo, sobre todo hoy en día: "Resulta extraño que, en un tiempo en el que cualquier incidente se graba, especialmente en un avión, no haya aparecido ni un solo vídeo o foto que muestre la supuesta actitud peligrosa del grupo".

Además, aseguran que el trato que recibieron los jóvenes, "incluyendo el arresto violento de la monitora del grupo", ha supuesto "una experiencia degradante para los menores", que además están creciendo "en una Europa marcada por el antisemitismo".

Y, finalmente, recuerdan que "el caso ha tenido una gran repercusión internacional, dañando la imagen de la compañía y de España", algo que ya se ha visto reflejado en medios de referencia en todo el mundo y que también ha pasado políticos del más alto nivel como el ministro francés de Asuntos Exteriores o congresistas americanos.

"La situación –concluyen– exige una respuesta contundente tanto de Vueling como del Gobierno de España" y que se determina sin dudas "si hubo discriminación por motivos religiosos".

¿"Una rigurosa investigación"?

Precisamente al ser requerida por el ministro galo la responsable de la compañía, Carolina Martinoli le aseguró que se está desarrollando "una rigurosa investigación interna y que las conclusiones de dicha investigación se compartirían con las autoridades francesas y españolas", según ha declarado el portavoz del ministerio de Exteriores francés.

Sin embargo, si tal y como dice Yad Vashem la investigación no ha recabado los testimonios de los propios afectados ni los de otros pasajeros del vuelo, resulta muy complicado considerar que efectivamente está siendo rigurosa.

A todo esto hay que añadir que el asunto podría judicializarse en breve, ya el Club Kineret, organizador del campamento de vacaciones de los chicos, ha anunciado acciones legales contra Vueling y "toda autoridad implicada" por su "brutalidad" y por tratarse de una actuación "injustificada".