La Asamblea Regional de Murcia dio este pasado jueves luz verde definitiva a las cuentas autonómicas del año próximo, que pondrán a disposición del Gobierno de Fernando López Miras la inversión más alta de la historia de la comunidad autónoma. El Ejecutivo murciano destinará al sostenimiento del Estado del Bienestar más del 80% del presupuesto, lo que supone un gasto de 4.900 millones que se repartirán de la siguiente manera: 2.358 millones para Salud, 1.797 a Educación y 754 a políticas sociales.
López Miras destacó el esfuerzo de diálogo llevado a cabo con los partidos con representación parlamentaria y agradeció a los diputados que han apoyado las cuentas autonómicas su "altura de miras". Al mismo tiempo reprochó a los socialistas que "los de siempre hayan dado la espalda a los presupuestos y a los ciudadanos de la Región de Murcia, ya que ni siquiera quisieron sentarse a negociar con el Gobierno regional".
Los presupuestos de Murcia para 2023 incluyen nuevas medidas de moderación fiscal para aliviar la presión sobre las clases medias y los colectivos más vulnerables, al tiempo que consolidan un espacio de libertad económica capaz de atraer nuevas inversiones y de generar empleo. Esta política de liberalización económica y rebaja de la presión fiscal permitirá a familias y pymes un ahorro de casi 400 millones de euros, que podrán ser destinados a gasto o a inversión, paliando de forma efectiva las consecuencias de la actual espiral inflacionaria.