El Gobierno defendió el acuerdo con el PNV sobre el cupo vaso y rechazó que las comunidades autónomas tengan motivos para quejarse. "No hay agravio comparativo alguno", zanjó Íñigo Méndez de Vigo, que se felicitó porque "esté avanzando la cultura del pacto" después de que los Presupuestos superaran su primer trámite parlamentario. El cupo es un aspecto que "complementa la distribución de recursos" entre las distintas regiones del país, insistió el portavoz, después de que el Consejo de Ministros aprobara el listado de los representantes del Ejecutivo que participarán en la comisión mixta del concierto económico entre el Estado y el País Vasco.
La reacción del Ejecutivo llegó después del aluvión de críticas por parte de barones autonómicos tanto del PP como del PSOE. Alberto Núñez Feijóo, el único líder popular que gobierna con mayoría absoluta, reclamó públicamente a Mariano Rajoy que explique a todas las comunidades los detalles del pacto con el PNV y cómo funciona el cupo para saber "por qué van a pagar 500 millones de euros menos". "El acuerdo para nada beneficia al conjunto", se sumó el Gobierno de Castilla y León, que dirige Juan Vicente Herrera. Extremadura, Comunidad Valenciana o Aragón también se sumaron las críticas
Fuentes de la Moncloa reconocieron que son conscientes del malestar de "algunas" comunidades pero justificaron el pacto con el PNV, partido que Rajoy considera "de palabra" y "serio" y con el que pretende seguir negociando a medio plazo. "Es un socio fiable, que representa la Euskadi moderada que no tiene que ver con el rupturismo de otros sitiso, con el que queremos seguir hablando", apuntaron al más alto nivel. La "única enseñanza" que tiene la votación de los Presupuestos es que "pactar, acordar y poner en común objetivos generales es bueno", sacó pecho el portavoz.
Así las cosas, incluso antes del turno de preguntas, Méndez de Vigo quiso resolver la pugna con las comunidades poniendo en valor que la aprobación de las cuentas públicas supone "una garantía de inversión en todas" las regiones, previendo un aumento de más de 5.300 millones siendo Cataluña la más beneficiada. Y, recordó, en esa distribución no entra el País Vasco por su régimen foral.
Además, Méndez de Vigo afirmó que ya está en marcha la comisión, fruto de la conferencia de presidentes, gracias a la cual se abrirá el melón de la financiación autonómica, que en teoría se abordará entre todas las comunidades y no de forma bilateral.