Insultos, amenazas, groserías y primeras damas: así ha sido la manifestación del 8-M
La manifestación del 8-M ha vuelto a congregar a una multitud llamativa y variopinta coreando consignas contra el heteropatriarcado, el PP, Cs y Vox.
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Una joven se destacaba sobre el resto de los manifestantes reclamando la revolución de la vulva... pero eso sí, estaba subida a un paciente aliado.
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Al parecer las mujeres también son maltratadas en los medios de comunicación, no sabemos si se refieren a las presentadoras de laSexta, a Ana Rosa, a la Grisso o a Julia Otero.
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Lecturas socialdemócratas para amenizar la huelga feminista.
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Hermanas sí, pero no de todas, también las mujeres pueden ser "enemigos de clase".
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Una pancarta de sincero agradecimiento a Pablo Casado, o quizá no tan sincero...
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Por primera vez en la historia una manifestación feminista ha guardado uno de sus puestos principales a una 'mujer de', en este caso la del presidente del Gobierno, que gritaba y saltaba rodeada de ministras y ministros.
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La exvicepresidenta Teresa Fernández de la Vega también ha estado en la manifestación, pero curiosamente muy lejos de la pancarta del PSOE.
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Machete al machote.
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Además de eslóganes más típicos como "vamos a quemar, vamos a quemar, la Conferencia Episcopal" algunas reclamaban un incendio que se extendiese aún más.
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Las referencias Vox tampoco han faltado.
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Una de las cosas más llamativas del feminismo que se ha visto en esta manifestación es su obsesión por los genitales.
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Sorprendentemente, o quizá no tanto, las propuestas de Ciudadanos han tenido un éxito discreto: "Vamos a quemar el feminismo liberal, vamos a quemar a Rivera, Casado y Abascal" ha sido uno de los eslóganes coreados.
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"Albert Rivera concubina de primera", gritaban estas mujeres de los "barrios olvidados" que se ve que creen que el feminismo es insultar a una mujer por con quién se acuesta.
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Aitana Sánchez-Gijón y Marisa Paredes eran dos de los rostros conocidos de la sección de actrices de la manifestación. Entre sus eslóganes frases como "somos actrices y no meretrices" -una aclaración a priori innecesaria- o "ningún papel por mi cuerpo de mujer".
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La idea de que el capitalismo es culpable recorría buena parte de la manifestación.
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Algunos aliados lo han llevado sobre la piel.
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Uno de los momentos culminantes de la manifestación ha sido la aguerrida performance de un grupo de jóvenes consistente en enceder unas bengalas, desplegar una pancarta y quedarse así quietas entre los aplausos y los gritos del público. Tras el éxito del numerito se han abrazado entre ellas.
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Lo más llamativo del cartel de esta joven es que al descartar a Vox y a la misoginia parece dar a entender que hay quién sí meterá "la mano" en su vagina.
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El patriarcado, el capital, la misoginia y la sequedad vaginal... ¿están interconectados?
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Una mujer que no descarta ser madre.
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Esta era la sección de "mujeres de la cultura", se notaba sobre todo por rimas tan sutiles como "lo que menos me importa es tu banana / acércater que te enseño katana".
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En toda manifestación feminista no pueden faltar sacerdotisas con pócimas ancestrales y humeantes...
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Ni bailarinas...
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Ni una enorme batucada.
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El golpe del tetazo, último hit en las artes marciales feministas.
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Ya lo saben ustedes: deben estar agradecidos.
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Unas jóvenes mexicanas desfilando en silencio aportaban una nota de seriedad bastante respetable en mitad del circo.
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UGT, un sindicato que siempre ha destacado por la ausencia prácticamente total de mujeres en sus puestos más altos, ha llenado partes de la manifestación de globos y pancartas. Algunos grupos cercanos les gritaban: "¡Muchos globos... y poco más!".
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Uno de los eslóganes que se ha oido a algún grupo de mujeres muy jóvenes era "ito ito ito, mi hija tiene pito; oño oño oño, mi hijo tiene coño".
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Tras ser la tumba del fascismo y del machismo a Madrid también le tocará ser "la tumba del putero", al menos según gritaban algunos grupos muy partidarios de que la mujer use su cuerpo como quiera... siempre que a ellas les parezca bien.
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