
Si hasta ahora Emiliano García-Page era el socialista que con más descaro defendía una cosa y hacía la contraria, ahora es Guillermo Fernández Vara el que le arrebata ese primer puesto en el ránking de hipocresía en lo que al pacto con el separatismo se refiere. El expresidente de Extremadura, que en su día llegó a asegurar que abandonaría las filas del PSOE si se consumaba dicho pacto, no solo traga ahora con el conchabeo con ERC y el prófugo Puigdemont, sino que incluso se deshace en halagos con quienes, a su juicio, han sido protagonistas de un gran "cambio".
"Con el PP hacían referéndum y declaraciones de independencia. Ahora se implican en un futuro en común", asegura Fernández Vara en su cuenta de X (antes Twitter), donde, además, se muestra convencido de que "habrá Gobierno" y que "España habrá conseguido que los que antes la querían romper ahora se sumen a hacer posible su presente y su futuro".
Habrá gobierno.En unos meses habrá presupuesto. España habrá conseguido que los que antes la querían romper ahora se sumen a hacer posible su presente y su futuro.Ese es el cambio.Con el PP hacían referéndum y declaraciones de independencia.Ahora se implican en un futuro en común
— Guillermo Fdez Vara (@GFVara) November 2, 2023
Tal blanqueamiento contrasta con las innumerables críticas que el actual líder del PSOE extremeño siempre ha profesado a Junts y ERC, pero, sobre todo, con el órdago al sanchismo que él mismo lanzó en 2016. Por aquel entonces, Juan Carlos Rodríguez Ibarra -al que él mismo se refirió como "padre espiritual"- aseguró que, si se firmaba un acuerdo con los independentistas, él abandonaría el partido. Preguntado qué haría él en ese caso, Vara respondió tajante: "Probablemente, ir detrás suya".
"¿Sabe por qué dice eso, Juan Carlos? -continuó su explicación en una entrevista en la Cadena COPE-. Lo dice porque él sabe que este partido nació en el año 1879, es decir, en el siglo XIX, para combatir eso. Nació como un proyecto para unir España y para defender a la clase trabajadora. Entonces, claro, si tú ves que aquello por lo que has luchado toda tu vida, a lo que has dedicado todo tu tiempo, que ha sido a intentar sumar, a intentar argamasar este país, ahora alguien lo pone en peligro, pues evidentemente que ese no sería nuestro modelo, pero, en cualquier caso, eso no va a ocurrir, porque yo creo que para eso estamos en el debate que estamos. Y lo vamos a evitar, nadie tenga ninguna duda".
En vista de lo escrito ahora, la contundencia con la que se manifestó entonces parece haberse diluido en el tiempo. No en vano, ni lo ha evitado ni le tiembla el pulso a la hora de enmendarse a sí mismo y defender que los independentistas han sido protagonistas de un gran "cambio" que les hace trabajar, según dice, por un "futuro en común". De esta forma, se constata que los únicos socialistas que se atreven a plantar cara al sanchismo son aquellos que, como Felipe González, ya no tienen ni voz ni voto en el PSOE.

