
Yolanda Díaz ha empezado a mover las piezas para reactivar su coalición con Podemos, consciente de que la división podría abrir la puerta a un sorpasso por parte de la formación morada. La ministra de Trabajo y líder de Sumar ha dejado entrever que una unidad de fuerzas es esencial tras los desencuentros que han protagonizado de forma recurrente.
"Hay que volver a hacer lo que hicimos el 23 de julio", ha lanzado Díaz en un desayuno informativo apelando a la necesidad de superar las tensiones y reforzar la alianza con Podemos precisamente cuando están en plena promoción de la figura Irene Montero de cara a su vuelta a la política nacional.
Pese al carácter conciliador de la declaración, Díaz ha mandado una advertencia: "Quien no quiera estar ahí, lo tiene que explicar", pidiendo además "altura política".
El riesgo de un sorpasso es real. Con la reciente caída de apoyo en las encuestas para Sumar y el leve ascenso de Podemos, la jugada de Díaz pasa por recomponer la relación con Podemos deteriorada que se vio afectada por falta de confianza. "No hay ninguna circunstancia que pueda justificar no caminar juntas", ha aseverado Díaz en alusión a la ruptura de Podemos con Sumar en diciembre de 2023 y que ha generado una pugna en los partidos a la izquierda del PSOE.
Justifica la reactivación de la coalición con Podemos en que la fragmentación beneficia a la derecha.
Decreto Ómnibus
La vicepresidenta segunda ha animado a Pedro Sánchez a presentar nuevamente el Real Decreto Ómnibus "tal cual está, mañana mismo en Consejo de Ministros" arriesgándose a un nuevo varapalo parlamentario ya ser un decreto que mezcla la revalorización de las pensiones con cesiones a los socios de Sánchez. Díaz ha descargado toda la culpa contra el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, por tener en su mano más de un centenar de diputados, minimizando el golpe que supuso el voto en contra de los siete diputados de Junts.
De hecho, Díaz ha rechazado tajantemente que los de Carles Puigdemont hayan tumbado la aprobación de dicho decreto: "No es verdad", ha afirmado la vicepresidenta segunda para insistir en cargar toda la responsabilidad en el principal partido de la oposición. "Quiero ver yo que el PP vote de nuevo en contra de ese decreto, porque les va a salir caro", ha aseverado Díaz.

