Cayetana Álvarez de Toledo retrata a Trump en cinco líneas: "¡Qué vergüenza para Occidente!"

La portavoz adjunta del PP en el Congreso de los Diputados ha escrito un contundente mensaje en X en el que retrata con especial dureza los últimos movimientos del presidente Donald Trump y no sólo por lo que respecta a Ucrania, sino también por su actuación con la oposición venezolana.

En su mensaje, Álvarez de Toledo enlaza con la noticia de las declaraciones de Trump en las que culpa a Ucrania de haber comenzado la guerra y asegura que el propio Volodimir Zelensky y también María Corina Machado, a cuya causa también ha dado la espalda el recién llegado presidente, son "dos héroes abandonados" por la nueva administración americana.

Para la popular esto es una "victoria para los enemigos de la libertad", un título que muy pocos merecen tanto como Nicolás Maduro o Vladimir Putin, pese a lo que están encontrando un firme a apoyo en un presidente cuyo discurso y el de su vicepresidente es, paradójicamente, que están defendiendo la libertad.

Álvarez de Toledo termina señalando que el comportamiento de Trump no sólo es una "vergüenza para Occidente" sino que también es una "amenaza para la democracia".

Un deriva difícil de prever

El contundente mensaje de la diputada del PP llega después de una deriva de Trump que ha sorprendido a prácticamente todo el mundo: es cierto que el mandatario estadounidense había anunciado en su campaña que buscaría un acuerdo para acabar la guerra de Ucrania, pero no era tan esperable que ese acuerdo fuese en la práctica una rendición, que es lo que parece que en este momento se está planteando.

Además, en las últimas horas Donald Trump ha dado un paso más en su posicionamiento a favor de las tesis de Putin: acusando a Ucrania de haber empezado la guerra y excluyendo tanto a los ucranianos de las conversaciones de paz que ya se han iniciado en Arabia Saudí.

No sólo eso, el americano ha insultado a Zelenski, asegurando que sólo tiene un apoyo del 4% entre la población y exigiéndole unas elecciones que, como es lógico, es imposible celebrar en medio de una invasión y de una guerra extraordinariamente dura. Un requisito, el de unas elecciones libres, que además no exige a la otra parte, cuando Vladimir Putin es de sobra conocido por encarcelar e incluso asesinar a opositores.

La situación no sólo está teniendo el lógico impacto en la arena internacional, sino que puede tenerlo también en la política nacional, con el PSOE atrapado entre socios con una relación estrecha con Putin y el giro de Vox, que ahora se posiciona en un extraño pacifismo que en la práctica es una apelación a la rendición, después de que Abascal en su día incluso visitase Ucrania para mostrar su apoyo a la lucha del pueblo ucraniano.