
El Grupo parlamentario de Yolanda Díaz ha registrado una proposición no de ley para fomentar que los estudiantes se cojan bajas académicas, "que funcionen de manera similar a las bajas laborales existentes", como solución para aquellos que "padecen problemas de salud mental". Así se recoge en el texto registrado por Izquierda Unida que enfatiza que "el 16,3% de los adolescentes españoles presenta diagnósticos relacionados con problemas de salud mental".
La baja estudiantil que plantea Izquierda Unida podría alargarse hasta 12 meses. Esto supondría más de un curso académico perdido. IU encuentra en el ausentismo, la solución y el recurso de apoyo emocional y psicológico para "el 41,1% de jóvenes entre 13 y 18 años que manifiesta o cree haber tenido un problema de salud mental", como reza el texto mencionando el nuevo informe de Unicef sobre salud mental.
A modo comparativo el diputado y coordinador general de IU Andalucía, Toni Valero, destaca que "si un trabajador que padezca estos trastornos tiene derecho a una baja laboral, por qué no puede ser así para un estudiante", advirtiendo que si los jóvenes dejan de ir a clase "sufren consecuencias graves por carecer de este derecho, como pérdida de becas o una bajada en las calificaciones". Así, la formación aglutinada en Sumar, busca instaurar un sistema que permita a los estudiantes ausentarse de sus estudios y "dar flexibilidad al alumnado a la hora de entregar tareas".
Izquierda Unida, bajo la influencia del Ministerio de Juventud e Infancia liderado por Sira Rego, pretende encontrar consenso en la mayoría de los grupos en la Cámara Baja para que estudiantes que hayan concluido la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), "disfruten de este derecho" sin ser penalizados, argumentando que "el 50% de los trastornos mentales comienzan antes de los 18 años".
También insta al Congreso de los Diputados a dar luz verde a esta iniciativa legislativa para "no penalizar" faltas de asistencia en estudiantes que padecen problemas de salud mental con la devolución de becas estatales, destacando como algunas ayudas exigen a los alumnos no universitarios asistir al 80% de horas lectivas si no quieren devolver la ayuda. Una condición que para Izquierda Unida supone añadir más presión a los estudiantes.
La iniciativa parlamentaria también busca "reforzar al personal" para atender problemáticas de salud mental y realizar "campañas de concienciación" sobre los vínculos en redes sociales.

