En la contienda por liderar el espacio de la izquierda, Sumar intenta reformar la ley Trans, impulsada por la exministra de Igualdad y recién designada candidata de Podemos a las próximas elecciones generales, Irene Montero.
Los de Yolanda Díaz han registrado una proposición de ley en el Congreso de los Diputados con el objetivo de "reconocer los derechos de las personas intersexuales y no binarias", buscando la inclusión de un 'tercer género' en el Documento Nacional de Identidad.
Sumar también propone una indemnización económica "vitalicia, equivalente a la pensión mínima de la Seguridad Social para pensionistas mayores de 65 años", destinada a aquellas personas que hayan sufrido modificaciones genitales u hormonales sin su consentimiento.
En el texto, Sumar establece una definición para el reconocimiento legal de las personas no binarias e intersexuales. Introduce el concepto de "no binario" como "aquella persona cuya identidad y/o expresión de género no se circunscribe exclusivamente a las categorías de hombre o mujer, ni a los límites del género masculino o femenino. Se puede identificar con ambos géneros binarios, no identificarse con ninguno o vivir una identidad y/o expresión de género fluida y variable en el tiempo".
En lo que respecta a la intersexualidad, Sumar propone la siguiente definición: "Son variaciones biológicas producidas durante la formación fetal, de los caracteres sexuales primarios en las personas, que pueden variar, desde los genotipos humanos del tipo XX, XY, XXY, X0 o XXXY, entre otros; el fenotipo; las gónadas (ovarios, testículos, ovotestes); la genitalidad externa y/o interna; las estructuras endocrinas y su actividad emisora y/o receptora; la intervención del sistema límbico en el sexo y en el género; y los caracteres sexuales secundarios y terciarios".
Asimismo, la propuesta legislativa incluye la prohibición de la modificación genital en personas intersexuales menores de 12 años, salvo que las indicaciones médicas lo requieran, y establece el concepto de "sexo de crianza", definido como la "identidad social con la que la persona menor de edad intersexual o con juicio clínico de desarrollo sexual diverso será socializada hasta que voluntariamente defina su identidad real". En virtud de estos principios, Sumar sugiere que, al momento de registrar a un recién nacido, la mención del género podría dejarse en blanco.
De esta forma el grupo parlamentario liderado por la dirigente de Sumar, Verónica Barbero, persigue impulsar una reforma de la ley morada aunque todo apunta a que no contará con el apoyo del PSOE.