Sánchez recurre a bulos contra el PP para defenderse de Feijóo, que le acusa de ser el "lobo de una manada corrupta"

Pocos plenos se recuerdan con tanta tensión en el Congreso de los Diputados. Tras el informe UCO en el que sale señalado Santos Cerdán, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha tratado de defenderse ante las acusaciones del PP. "Hace un año escribió que era un hombre profundamente enamorado.

Hace cinco días que estaba profundamente decepcionado", ha recordado Feijóo que ha sentenciado al líder socialista como "profundamente atrapado en una trama de corrupción". El líder de oposición cree que el presidente del Gobierno es el "lobo que ha liderado una manada corrupta" y le ha conminado a presentar "la carta de dimisión" que es la "única que esperan los ciudadanos". El líder socialista ha declinado presentar su renuncia y ha asegurado que "el único adelanto que va a haber es el de la lógica sentencia de los casos de corrupción que afectan al PP".

Sánchez ha declinado responder a la pregunta que le hizo Feijóo: "¿Es cierto que le avisaron hace meses que era un corrupto?" El líder socialista ha asegurado que "la corrupción cero no existe pero en mi organización la tolerancia es absoluta". Los lapsus del presidente, visiblemente nervioso, han provocado la carcajada de Feijóo que ha ironizado con la frase "la tolerancia sobre la corrupcion es absoluta" que había pronunciado Sánchez. "Es un caso doloroso y hemos actuado", ha admitido el secretario general del PSOE.

Feijóo ha seguido ironizando sobre el discurso de Sánchez tras la Ejecutiva del PSOE. "Nos repartimos prostitutas pero no gobierna el PP" a la par que le ha recordado que "está usted en todas las portadas". Sobre la moción de censura que le ha conminado Sánchez a presentar, el líder del PP ha admitido que le faltan "cuatro votos y quién sabe quién aparecerá", en otra nueva alusión a Junts y PNV. "Ábalos fue el principio pero Cerdán no es el final", ha terciado el líder de la oposición.

A partir de ahí, Sánchez ha recurrido a una serie de bulos para decir "que ustedes no se renuevan, ustedes se repiten". "En Madrid, el Gobierno de la señora Ayuso siendo investigado por el novio, por el hermano por fraccionar contratos en centros de formación profesional", ha asegurado Sánchez. Lo cierto es que el hermano de Ayuso solo ha sido señalado por la compra de mascarillas pero las denuncias se han archivado por dos ocasiones, la última ante la Fiscalía Europa.

Hay otro caso que es el de fraccionamiento de contratos en construcción de centros de FP, que nada tiene que ver con el hermano o la pareja, y en el que la Comunidad de Madrid se ha personado como acusación popular. Sánchez ha seguido recurriendo a bulos inventándose casos al asegurar que el presidente valenciano, Carlos Mazón, está siendo "investigado por corrupción por financiación irregular".

También le ha reprochado otros casos que están siendo investigados como el del consejero gallego, Alfonso Villares, investigado por agresión sexual contra Paloma Lago y que el presidente, Alfonso Rueda, habría conocido en febrero, cuando se presentó la denuncia, pero no aceptó su renuncia hasta que fue imputado. Sánchez también ha hablado de los ceses de interventores en el Servicio Andaluz de Salud por denunciar irregularidades.

Las retahíla de casos de Sánchez, mezclado medias verdades con bulos, ha levantado a la bancada del PP que gritaban al unísono al grito de "dimisión, dimisión". "El PP es una enciclopedia de corrupción por capítulos autonómicos", ha sentenciado Sánchez ante los golpes de los escaños por parte de los diputados del PP. La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha pedido a Feijóo que "ponga orden en su grupo" a la par que ha pasado de puntillas por los gritos de la bancada del PSOE contra la oposición.

El siguiente en intervenir fue el líder de Vox, Santiago Abascal, quien ha reprochado a Sánchez que se gasten el dinero "en putas" mientras los jóvenes no pueden acceder a una vivienda. "Mientras su entorno robaba a los españoles se les apagaba la luz", ha proseguido en un tono que recordaba al de Podemos en 2015 salvo algunas expresiones como cuando ha afirmado que "mientras su entorno robaba, lo que quedaba, se lo entregaban a los inmigrantes irregulares".

Abascal ha augurado que los socios están dispuestos a aguantar "lo que sean" y ha sentenciado que "se sienta en el banco azul por un pacto entre clanes corruptos". Lo siguiente ha sido abandonar el pleno justificándolo porque quería quedarse "a escuchar sus embustes". "Es usted un corrupto y un colaborador", ha afirmado antes de bajas las escaleras. Sánchez le ha acusado de "falta de convivencia y de respeto" pero el líder de Vox ya no estaba para escucharle. En el pleno tampoco ha estado la vicepresidenta y líder de Sumar, Yolanda Díaz, como protesta por la falta de explicaciones de Sánchez. Del socio minoritario, sólo estaban la ministra de Sanidad, Mónica García, y el de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, porque tenían preguntas.