
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, perdonó este lunes de manera preventiva a miembros de su familia a pocos minutos de dejar el poder. Se trata de "un perdón total e incondicional" por cualquier acto "no violento" que hayan cometido entre 2014 y el día de hoy. Los perdonados son sus hermanos James, Valerie y Francis Biden y los esposos de los dos primeros, Sara Biden y John Owens.
De los cinco familiares, el que tiene mayor perfil por haber hecho una carrera empresarial más cercana al presidente es James Biden. Los republicanos del Congreso le investigaron junto al hijo de Biden, Hunter, por presunto tráfico de influencias.
Los perdones se anunciaron minutos antes del mediodía, la hora en la que estaba previsto que Donald Trump tomara posesión como nuevo presidente. Y llegan mientras los republicanos, que han prometido llevar ante la Justicia a familiares y colaboradores de Biden, asumen el poder.
"Mi familia ha sido objeto de ataques y amenazas incesantes, motivados únicamente por el deseo de hacerme daño, el peor tipo de política partidista. Lamentablemente, no tengo motivos para creer que estos ataques terminarán", dice el comunicado. "Pero las investigaciones sin fundamento y con motivaciones políticas causan estragos en las vidas, la seguridad y la protección financiera de las personas afectadas y sus familias. Incluso cuando las personas no han hecho nada malo y finalmente serán exoneradas, el mero hecho de ser investigadas o procesadas puede dañar irreparablemente su reputación y sus finanzas".
La emisión de estos indultos no debe confundirse con un reconocimiento de que hayan cometido algún delito, ni la aceptación debe malinterpretarse como una admisión de culpabilidad por algún delito", concluye Biden, quien también ha otorgado el perdón presidencial a funcionarios y militares a los que Donald Dtrump había amenazado con represalias.
Estos perdones, que llegaron un poco antes, a primera hora de la mañana, estaban dirigidos al principal estratega contra la pandemia, Anthony Fauci, al general retirado Mark Milley y a los integrantes del comité que investigó el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.
