La nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha reaccionado a las protestas violentas de inmigrantes en Estados Unidos, asegurando que el uso de la bandera mexicana en las mismas es "muy probable que haya sido una provocación". En su rueda de prensa, la mandataria ha afirmado que, aunque necesita "toda la información", condena rotundamente las "acciones violentas".
Sheinbaum se refería a la fotografía viral de un hombre encapuchado que, sobre una patrulla incendiada en Los Ángeles, ondeaba el símbolo patrio. La imagen fue difundida por el propio Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para denunciar la presencia de "extranjeros ilegales" en California durante las protestas contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Radical illegal foreign nationalists hailed a few Waymos to the LA protest, set them on fire, raised the Mexican flag and chanted anti/American slogans. Way to go Democrats! pic.twitter.com/Ebd31KNTEk
— Justin Hart (@justin_hart) June 9, 2025
Estas declaraciones se producen en un clima de tensión bilateral, después de que la secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Kristi Noem, acusara a Sheinbaum de incitar las protestas, extremo que la presidenta mexicana ha negado "absolutamente". Otros republicanos como Stephen Miller, arquitecto de la política migratoria de Donald Trump, también han criticado los sucesos.
Pese a las imágenes, Sheinbaum ha querido defender que "en general la comunidad mexicana se manifiesta de manera pacífica por sus derechos", reiterando su rechazo a cualquier manifestación violenta.