Finlandia se corona, un año más, como el país más feliz del mundo, a pesar del frío y de las pocas horas de sol en invierno. Es la séptima vez consecutiva que el país aparece en primera posición, puesto que ocupa desde 2018. Le siguen de cerca sus vecinos nórdicos: Dinamarca, Islandia y Suecia. España, en el puesto 36, desciende cuatro puntos en la clasificación. Son 143 países los que se evalúan según seis parámetros, entre ellos el PIB, la esperanza de vida o el apoyo social. "En lo que realmente destacan los países escandinavos, según hemos comprobado, es en el tejido social, el capital social de su sociedad.
La gente confía en los demás, confía en las instituciones, dispone de apoyo social, tanto institucional como personal", dice el investigador y editor del Informe Mundial sobre la Felicidad. Situación que contrasta con la de Afganistán, en el último puesto del ranking. Es el país más triste del mundo. "La persona media en Afganistán da un 1,7 en la escala de 0 a 10 en términos de satisfacción vital", explica. Y es que el clima no influye tanto a la hora de ser felices y sí lo hace nuestro entorno.

