
Las elecciones regionales en Brandemburgo no supusieron, por los pelos, una nueva victoria de Alternativa por Alemania. El Partido Socialdemócrata ganó los comicios con un 30,9 por ciento de los votos, lo que permitirá al actual líder regional, Dietmar Woidke, mantener el Gobierno y también ha permitido al canciller Olaf Scholz celebrar los resultados, que dejan a la ultraderecha en segunda posición a tan sólo unas décimas, con el 29,2 por ciento.
Pero pese a la victoria, Scholz no tiene hoy demasiado que celebrar: los resultados son de nuevo un desastre para la coalición que lidera junto a Verdes y liberales a un año de las elecciones federales. Estos son algunos datos clave de los comicios regionales alemanes de este domingo:
1.Victoria de Woidke, pero no de Scholz: los analistas dejan bien claro que por mucho que Scholz se congratule del resultado de su partido, que subió 4,7 puntos erigiéndose como opción vencedora frente a la ultraderecha, tiene poco que ver con él. El candidato Woidke se esforzó por desmarcarse de Scholz, con el que no compartió mitin alguno. La victoria sería sólo suya, aunque también le dé aire a un canciller en horas bajas en su propio partido.
2.Desastre para Los Verdes y para el FDP: la victoria del socialismo ha venido acompañado del hundimiento de verdes y liberales. Los ecologistas no entrarán en la cámara regional al quedarse lejos del 5% mínimo para lograr representación: obtuvieron un 4,1 por ciento, 6,6 puntos menos que en los anteriores comicios. Los liberales prácticamente desaparecen: lograron un ínfimo 0,8 por ciento de los votos frente al 4,1 por ciento de 2019.
3.La Alianza Sahra Wagenknecht sigue creciendo: el partido izquierdista Die Linke se hunde mientras crece la escisión creada en torno a su ex dirigente Sahra Wagenknecht. Con un discurso que busca alejarse distanciarse de algunos de los mantras actuales de la izquierda y que en algunos casos le aproxima a la AfD, la nueva formación sigue abriéndose camino y en estos comicios se ha convertido en tercera fuerza, como ya logró en Turingia y Sajonia. Con un 13,5 por ciento de los votos, se ha convertido en un elemento de incertidumbre más de cara a las elecciones del año que viene.
4.El SPD, salvado por los pensionistas: Encuestas postelectorales arrojan que aunque quedó en segundo lugar la AfD fue la opción predilecta en todos los tramos de edad de menores de 60 años y que el SPD sólo despuntó entre los mayores de 70 años. Entre los votantes jóvenes, de entre 16 y 34 años, sólo uno de cada cinco votó al SPD.
La CDU, fuera de juego
El consuelo para la coalición es que para la CDU los resultados fueron un desastre. Obtuvo un 12,1 por ciento de los votos, 3,5 puntos menos que en los anteriores comicios, convirtiéndose así en cuarta fuerza tras una campaña que giró en torno al pulso entre el SPD y Alternativa por Alemania.

