Pocos minutos antes de las 19:00 hora local (17:00 GMT), se cerró el acceso al público, según muestran las imágenes distribuidas desde el interior de la basílica. A partir de ese momento, solo religiosos y personal del Vaticanopermanecieron en el templo para asistir a la ceremonia de cierre del féretro, paso previo al funeral y entierro previstos para este sábado.
La ceremonia fúnebre marcará el cierre de una era para la Iglesia católica, con miles de fieles y líderes internacionales esperando rendir homenaje al pontífice.

