En la llamada, Putin aseguró que Ucrania está boicoteando las negociaciones de paz con sus recientes ataques, mientras que desde Kiev acusan a Moscú exactamente de lo mismo.
La conversación, que duró una hora y cuarto, terminó sin avances visibles. Donald Trump, tras la llamada, apareció brevemente en el balcón de la residencia presidencial, sin ofrecer declaraciones sustanciales.
Putin también mantuvo otro contacto telefónico clave: habló por primera vez con el papa León XIV. En la conversación, el líder ruso responsabilizó a Ucrania de escalar el conflicto, aunque agradeció al pontífice su preocupación por la situación humanitaria.
Mientras tanto, en el lado ucraniano, el asesor de Volodímir Zelenski, junto al senador estadounidense Marco Rubio, evalúa los próximos pasos a seguir. Todo ello en un contexto marcado por intereses estratégicos, como el reciente acuerdo sobre tierras raras en territorio ucraniano.