
El 11 de julio de 2021, el pueblo cubano salió a sus calles para pedir, de forma histórica, la libertad que tanto ansía. De forma pacífica y multitudinaria, los cubanos pidieron el fin de una dictadura que los tiene sumidos en una crisis extraordinaria de escasez de alimentos, medicinas, combustibles y, sobre todo, democracia.
Matías Jove, director ejecutivo de la Asociación Española Cuba en Transición, ha afirmado que, aquel 11J "fue realmente cruel; se intensificó la represión, se incrementó la censura y se encarceló a centenares de disidentes".
El equipo de La Noche de EsRadio ha podido hablar con Anamely Ramos, profesora de arte y miembro del Movimiento San Isidro de La Habana, creado por artistas e intelectuales en 2018 para luchar contra la censura y, en concreto, contra el Decreto 349, regulador de la actividad artística y herramienta a través de la cual el Estado define qué es arte y qué no. Anamely ha declarado lo siguiente:
"El Estado cubano quiere que veamos esa fecha como una fecha de luto, de pérdida, de fracaso. Sin embargo, tenemos que tratar que todo el mundo entienda que fue el momento en que los cubanos salieron a la calle por su libertad. Una libertad que merecemos y que ha sido demasiado dilatada.
Los que peor están son los presos. Nuestra labor es que ellos se mantengan lo más animados posibles, que las noticias no mueran y que la violencia contra los cubanos no se normalice".
Los artistas libres no tienen cabida en la Cuba comunista. Morales, uno de los muchos exiliados, asegura que, tras "denunciar cosas del sistema que creía que estaban mal", comenzaron a censurarlo y, a raíz de eso, decidió venir a España porque "la dictadura es cada vez más reacia con los cubanos". Según otro de los protagonistas, un bailarín de treinta y un años, el Gobierno cubano "vive en una realidad diferente a la de su gente. Maltrata y censura".
Al mismo movimiento que Anamely pertenecen, también, el artista Luis Manuel Otero Alcántara y el rapero Maykel Castillo, detenidos durante el 11J y presos, según palabras de Anamely, en "cárceles de máxima seguridad". Castillo dio la vuelta al mundo en 2021 por los dos Grammys que ganó, desde la cárcel, por su canción "Patria y Vida".
Las consecuencias de aquel 11 de julio son, todavía, el presente de muchos cubanos que, o bien ellos o bien sus familiares, permanecen encarcelados y represaliados.
Wilber Aguilar Bravo es el padre de un preso político del 11J. Su hijo, a sus veinticuatro años y a pesar de su discapacidad intelectual, se encuentra preso desde entonces junto a reclusos de elevada criminalidad aunque él no cuenta con antecedentes penales. Wilber confesó a La Noche de EsRadio, en los días previos a este tercer aniversario, que, cuando el programa estuviese emitiendo el especial en homenaje a su lucha, él se encontraría en la prisión del Combinado del Este visitando a su hijo. Wilber asegura no haber perdido la esperanza por su libertad.
Ana Belkis también ha relatado ante los micrófonos de EsRadio el encarcelamiento de su hermano y de su sobrino. Belkis ha aprovechado para denunciar las torturas "físicas y psicológicas" que ambos sufren, "de forma permanente", en la prisión. Nadie de su familia ha tenido, durante tres meses, conocimiento alguno sobre el paradero de su hermano, al que se le prohíbe "el derecho a llamadas telefónicas y visitas".
Ilsa Ramos también denuncia los malos tratos recibidos por su marido, Yasmani González. Ella asegura haberlo denunciado, pero sin esperanza: reconoce que "en Cuba no existe la ley".
Según los datos de Prisioners Defenders, los presos políticos que, en junio de 2021, tenía el régimen castrista eran 152. A finales de ese año, la cifra ascendió a 955 prisioneros y, actualmente, son 1.117.
La situación en la isla ya era mala antes de aquella jornada, pero, desde entonces, no ha parado de empeorar. La prueba más clara de la extrema gravedad que atraviesa Cuba es el exilio constante de cientos de cubanos, obligados a abandonar su país ante la imposibilidad de asegurar un buen futuro a sus familias.
Los que huyen de aquel horror no tienen en su planes la idea de volver. Así lo reconocen los exiliados que han hablado con La Noche de Dieter, que aseguran que no volverán a Cuba hasta que no deje de ser una dictadura "y sea un país libre en el que los cubanos podamos elegir a nuestro presidente y tener nuestras leyes". Los cubanos exiliados no volverán hasta que "el régimen monolítico, de pensamiento único" deje de estar en el poder.
Otro de los entrevistados, Emilio, ha aprovechado para hacer un llamamiento a la sociedad española. Alerta sobre "el socialismo creciente" que detecta en nuestro país y asegura que ellos, que lo han vivido, "saben perfectamente que solo trae desgracia". Llamamiento que también defiende Carolina Barrero, historiadora del arte y activista, que le pide a España y a la Unión Europea ponerse "del lado de los derechos humanos, de la democracia y de los cubanos" en su lucha. Barrero exige el fin de "la complicidad y el romanticismo con un régimen que no ha hecho más que oprimir y someter al pueblo"
Matías Jove, ha expresado a esta casa la "vergüenza" que siento, como español, de saber que España financia a Cuba, país que, tras Grecia, es "el primer deudor de España". Jove ha denunciado la represión de Cuba a su pueblo y su importante papel "en la desestabilización de las democracias".
Cuba es la patria de los padres que llevan años sin ver a sus hijos, de los abuelos que no conocen a sus nietos y de los hermanos que han vivido más tiempo a miles de kilómetros que juntos.