La oposición sale a las calles de Venezuela para reivindicar su triunfo, dos meses después del fraude chavista

Se han cumplido ya dos meses del evidente fraude electoral cometido por la dictadura chavista, y en este tiempo se han presentado una serie de evidencias que apuntan y demuestran la victoria del candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, hoy asilado en España.

En todo este periodo, la comunidad internacional ha seguido presionando al régimen de Nicolás Maduro para que muestren las pruebas de su supuesta victoria anunciada por el Consejo Nacional Electoral (CNE), algo que no ha ocurrido hasta el momento y que ya nadie espera que se cumpla.

Para seguir presionando a la dictadura y reivindicar su triunfo, miles de venezolanos salieron este sábado a las calles de diferentes ciudades del país. Las manifestaciones en solidaridad con la oposición también se repitieron en otras ciudades de la región como Bogotá y también en otras localidades de Brasil. Esta vez, María Corina Machado no apareció en público para evitar una posible detención por parte de las fuerzas de seguridad chavistas, pero dejó un mensaje a través de un mensaje.

En el audio señaló que "cada acta contiene miles, millones de historias, de pasos, de lágrimas, cada acta es un testimonio de nuestra fuerza, valentía y de nuestra determinación para ser libres e iguales, cada acta contiene la verdad de la soberanía popular expresada en cada voto". Además, dijo que el Gobierno de Maduro está "más solo, aislado y débil, sus arremetidas violentas son una señal, evidentemente, de desesperación".

Sobre la persecución contra opositores, dijo que "ante la brutal represión, tenemos que seguir cuidándonos y mantenernos organizados de forma inteligente, esta nueva fase se llama la estrategia del enjambre, nuestra protesta ciudadana evoluciona para que tenga el menor riesgo posible".

Machado explicó que las protestas de este sábado se llevaron a cabo bajo la modalidad de "enjambre", para que los ciudadanos pudieran "aparecer y desaparecer" rápidamente por motivos de seguridad.

Como suele ser normal, la dictadura chavista también convocó a sus seguidores a una contramarcha para intentar opacar la concentración opositora que ha reunido a miles de personas en decenas de ciudades de todo el mundo.