El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha anunciado este lunes que "las comunicaciones oficiales con Estados Unidos están deshechas". El mandatario responsabiliza a Washington de lo que calificó como una "agresión en toda la línea", que —según él— incluye acciones judiciales, diplomáticas, políticas y hasta militares.
Maduro denunció un supuesto operativo estadounidense contra un barco atunero venezolano y advirtió que, de haberse producido un enfrentamiento armado, habría sido el incidente que "buscan los sectores extremistas de EE.UU.".
Acusó directamente a la Casa Blanca de romper todo canal diplomático y aseguró que "con amenazas, bombas y chantajes no habrá jamás entendimiento". En tono desafiante, afirmó que Venezuela responderá "integralmente" a cualquier agresión.

