El Gobierno israelí ha lanzado una alarma en el norte del país por la sospecha de una infiltración en el espacio aéreo desde el Líbano. Medios locales apuntan a que podría tratarse de una infiltración de drones de Hezbolá. La alarma finalmente se ha desactivado y el Ejército ha informado de que no se han detectado aparatos procedentes del Líbano.
El incidente ha obligado a poner en guardia al Centro Médico Rambam, en Haifa, un hospital subterráneo con 2.000 camas, según ha informado el diario The Times of Israel.
"Las Fuerzas de Defensa están monitoreando el área desde tierra y aire", han indicado en un breve comunicado en la red social X, agregando que los residentes "deben seguir obedeciendo" las instrucciones dadas por las autoridades en caso de alarma.
Las sirenas se activaron en la zona de los altos del Golán, en el norte de Israel y fronteriza con Líbano y Siria, y pusieron en alertas a zonas de Israel como Safed o Tiberías. "Esto es lo que temíamos y para lo que nos estábamos preparando", dijo el jefe del Consejo Regional, Galil Elyon, al Canal 12, sobre la posibilidad de una incursión en Israel.
Este miércoles, un misil antitanque fue lanzado desde Líbano contra un puesto militar israelí en las cercanías de Arab al Aramshe, una comunidad ubicada a pocos cientos de metros de la frontera libanesa, sin causar daños o heridos.
Las fuerzas israelíes respondieron con ataques en territorio libanés. Desde el domingo, se han sucedido disparos de cohetes y misiles desde el Líbano por parte de Hezbolá y facciones palestinas en territorio libanés. Por su parte, las tropas israelíes han atacado con artillería y bombardeos aéreos un gran número de puntos en el sur del Líbano.