Mientras Hamás y los medios de comunicación españoles aseguraban que más de cien personas murieron en un ataque de Israel a un grupo de gazatíes que trataban de lograr ayuda humanitaria, la imágenes recogidas por un dron dejan bien claro que no hubo ningún tiroteo que siquiera pueda ser considerado el inicio de la estampida que provocó las muertes.

