L D (EFE) "TI fue la única empresa que me permitió trabajar en la miniaturización de componentes electrónicos a tiempo completo. Fue una gran decisión", según manifestó Kilby en su autobiografía. Esos circuitos integrados llevaron a la creación de microprocesadores que, en la actualidad, forman parte de casi todos los aparatos digitales, desde las televisiones, hasta los hornos microondas, pasando por las radios a transistores y los ordenadores. Según TI, esos circuitos integrados, que sustituyeron a los tubos al vacío, registraron en 2004 ventas por 179.000 millones de dólares (148.031 millones de euros) en un mercado global de la electrónica de 1,1 billones de dólares (unos 909.629 millones de euros).
Según manifestó Tom Engibous, presidente de TI, el trabajo de Kilby es comparable al de aquellos que "transformaron al mundo" como Thomas Edison, Henry Ford y los hermanos Wright.
Kilby dijo, tras ser galardonado con el Premio Nobel, que pensaba que su invento "sería importante para la industria electrónica", pero no entendía "cómo iba a impulsar su crecimiento".
Nacido en Kansas (EEUU) en 1923, Kilby heredó el interés por la electrónica de su padre, quien era dueño de una pequeña empresa de aparatos eléctricos, y en 1970 recibió la Medalla Nacional de las Ciencias, en una ceremonia en la Casa Blanca. Según manifestó en su autobiografía, comenzó a interesarse por los tubos al vacío cuando escuchaba música en la radio. Estudió ingeniería eléctrica en las universidades de Illinois y Wisconsin, e inició su carrera en Centralab Division of Globe Union, en Milwaukee, donde desarrolló circuitos de cerámica para productos electrón