
El Gobierno ha presentado este miércoles en el Congreso 37 enmiendas al proyecto de Ley de Función Pública de la Administración General del Estado. Entre estas reformas se encuentra la extensión hasta los 72 años (actualmente es de 70 años) de "la jubilación forzosa para aquellos funcionarios que quieran seguir trabajando, de manera voluntaria, una vez lleguen a la edad ordinaria de retiro", señalan desde el PSOE. En la enmienda destacan el papel del relevista que pretenden que sea funcionario de carrera.
37 enmiendas
En cuanto a las otras enmiendas, se encuentran diferentes medidas que incluyen "medidas encaminadas a promover la inclusión de las personas con discapacidad", conciliación de la vida familiar o la recuperación de la jubilación parcial.
Desde el Partido Socialista aseguran que estas medidas tienen como objetivo "igualar al sector privado en la posibilidad de transitar entre la vida activa y el retiro, garantizando el traspaso de conocimientos entre generaciones". Sin embargo, detrás de esta idea está la evidente insostenibilidad del sistema de pensiones.
En cuanto a la jubilación parcial, este modelo está contemplado para trabajadores que tienen como mínimo 60 años y consiste en compartir la jubilación con un trabajo a tiempo parcial que, en la mayoría de los casos, se vincula a un contrato de relevo. Aquí es donde entra en juego la función del relevista que es la persona encargada de sustituir al trabajador que se retira parcialmente.

