Australia vive el mayor momento de insatisfacción de su población con la vivienda desde que se recuerda, y esto es algo que está llevando al Gobierno australiano a tomar medidas drásticas con respecto a las viviendas disponibles dentro de su territorio. Tanto es así que este pasado domingo, su tesorero Jim Chalmers salió en rueda de prensa, junto con la ministra de Vivienda, Claire O’Neil, a decir lo siguiente:
"Vamos a prohibir las compras extranjeras de viviendas establecidas desde el 1 de abril de 2025 hasta el 31 de marzo de 2027", a lo que añadió que, si era necesario, la prohibición se extendería en el futuro. El Gobierno del laborista Anthony Albanese es consciente del grave problema al que se enfrenta con el tema de la vivienda, más aún con las elecciones federales del 17 de mayo a la vuelta de la esquina.
La ministra O’Neil afirmó en televisión que la prohibición probablemente liberaría alrededor de 1.800 propiedades por año para los compradores locales. "Estas iniciativas son una parte pequeña, pero importante, de nuestra gran y amplia agenda de vivienda, que se centra en aumentar la oferta y ayudar a más personas a conseguir una vivienda", expresaron los miembros del Gobierno.
El Gobierno también aprobó recientemente reformas en materia de vivienda que incluyen un plan de capital e incentivos fiscales para promotores, con el fin de aliviar la presión de los costes y alcanzar el objetivo de construir 1,2 millones de nuevas viviendas de aquí a 2030.
Los australianos están muy insatisfechos con la cuestión de la vivienda y eso se ha visto reflejado en una reciente encuesta internacional de Gallup, una empresa estadounidense de análisis y asesoría. En dicha encuesta, donde se entrevista a otros países de la OCDE, el 76% de los encuestados australianos declara que está insatisfecho con la disponibilidad de viviendas buenas y asequibles. Aquí podemos ver dicha encuesta, donde también aparecen los resultados de España.
Como se puede ver, dentro de los países que conforman la OCDE, Australia es el segundo país donde más insatisfacción hay con el tema de la vivienda, mientras la media de la OCDE se sitúa en un 50% de insatisfechos y un 43% de satisfechos. Si observamos el caso de España, vemos que el 62% de los encuestados españoles se declara insatisfecho con la vivienda, por sólo un 35% de encuestados satisfechos.
Esta insatisfacción de los australianos no es para menos después de observar cuanto se ha disparado el precio de la vivienda en Australia en apenas cuatro años. De acuerdo con la plataforma inmobiliaria Propestar, esta ha sido la evolución en los precios tanto de los pisos como de las casas.
Tal y como reflejan los dos gráficos, el precio del metro cuadrado de los apartamentos en Australia ha pasado de tener un precio de 5.548 dólares australianos en enero de 2021 a ser de 12.477 dólares australianos en enero de este año. Mientras tanto, el precio del metro cuadrado de las casas en Australia ha pasado de ser de 3.023 dólares australianos en enero de 2021 a tener un precio de 4.505 dólares australianos en enero de 2025.
Atendiendo a estas cifras, es más que comprensible la insatisfacción de los australianos con la vivienda y es normal que el Gobierno laborista esté preocupado con la evolución de dicho descontento, y más teniendo en cuenta que el Partido Liberal de Australia les aventaja en 7 puntos en las encuestas.
En resumidas cuentas, vemos que la problemática de la vivienda no es algo exclusivo de España y que en países como Australia está llevando a tomar medidas drásticas como la prohibición de comprar viviendas a los extranjeros durante los dos próximos años, además de otras políticas del Gobierno para incentivar la creación de más de un millón de viviendas de aquí a 2030.