El presidente de Telefónica, Marc Murtra, se ha estrenado este jueves comandando la presentación de resultados de la compañía en 2024. Esta rendición de cuentas de Telefónica se produce en una semana de grandes cambios en el consejo de Administración de la teleco.
Ayer miércoles, Telefónica nombró a Carlos Ocaña como vicepresidente de la operadora. El puesto estaba vacante tras el fallecimiento repentino de Javier Echenique el pasado diciembre.
Ocaña era desde mayo el representante de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en Telefónica. Cabe recordar que el Gobierno de Pedro Sánchez convirtió a la SEPI en el primer accionista de la compañía, con la compra del 10%, en una polémica operación que le ha constado al contribuyente unos 2.285 millones de euros.
"Revisión estratégica" de Telefónica
Murtra ha centrado su intervención en el anuncio de una "revisión estratégica" de "todos los negocios de la compañía". En este sentido, el ex presidente de Indra ha reconocido que "las estrategias inciden de alguna manera en la composición del consejo", por lo que no se descartan más nombramientos.
Así, Murtra inicia en Telefónica "una reflexión estratégica" para "poner el foco en negocios clave, la lógica industrial, la consolidación en Europa y crear valor para nuestro accionistas" explicó el directivo, cuya operadora también se centrará "en la generación de caja y la disciplina financiera". En el segundo semestre del año la operadora actualizará este plan.
Hispanoamérica y Europa
En el plano internacional, Murtra ha reconocido que Telefónica buscará fusiones en Europa ante el gran número de compañías existentes y frente a otros países con grandes compañías, como China o EEUU. "Estamos viendo un cambio geoestratégico" y "va a haber cambios drásticos" ha vaticinado. El directivo también ha clamado por que Europa necesita "soberanía tecnológica".
Murtra también se ha referido a que Telefónica se encuentra en un proceso de reducción de su exposición a los mercados de Hispanoamérica. Precisamente, el deterioro de sus activos al otro lado del charco ha influido en que la compañía haya registrado pérdidas de 49 millones en el 2024.
Argentina y Venezuela
Esta misma semana, Telefónica anunció la venta de su filial en Argentina a Telecom Argentina, controlada por Clarín, por 1.245 millones de dólares (en torno a 1.200 millones de euros). Esta operación no ha gustado nada al presidente de Argentina, Javier Milei, que señaló que estudiará si esa transacción puede suponer un riesgo de monopolio.
Preguntada por la reacción de Milei, la directora general de Finanzas y Control de Telefónica y responsable de Hispanoamérica, Laura Abasolo, explicó que la operación ya está cerrada, que Telefónica ya ha cobrado la venta y que "tanto el activo como los posibles riegos regulatorios ya no son cuestiones que afecten a Telefónica".
Abasolo también fue preguntada por el sorprendente anuncio este mes de una inversión de 500 millones de dólares (unos 480 millones de euros) en Venezuela, un país con una elevada inseguridad jurídica. Según la directiva, esta apuesta "es compatible" con el plan de desinversión de la compañía en Hispanoamérica. "Somos el principal operador en el país y el entorno macro de venezuela está mucho mejor y estamos repatriando" dinero. Incluso, "las demás operadoras de Venezuela están invirtiendo" señaló.
Respecto a la larga lista de negocios que se baraja que Telefónica pudiera estar interesada en adquirir. Murtra ha respondido a todas las cuestiones descartando que Telefónica esté valorando comprar Minsait (la tecnológica de Indra), entrar en Prisa, en el negocio aeroespacial o pujar por la TV en abierto de Sánchez, que también esta semana ha provocado una guerra interna en Prisa.