Sumar ha presentado la versión final del documento político de la Asamblea 2025 y, entre sus propuestas habituales para disparar el gasto público o aumentar el intervencionismo económico, el documento apuesta por el ecosocialismo para "cubrir las necesidades básicas dentro de los límites del planeta".
En el documento recientemente difundido por la formación, los partidos políticos integrados en la plataforma de Yolanda Díaz proponen un futuro en el que el Estado, legitimado por la urgencia de una supuesta "crisis ecológica", asume control absoluto de la economía, la producción y el estilo de vida de los ciudadanos.
Según Sumar, todas las políticas públicas (impuestos, modelo energético, industria, agricultura, urbanismo...) deben estar subordinadas a los objetivos climáticos. Y, aunque no se habla de decrecimiento, sí se pone un techo a la creación de riqueza: debe "cubrir las necesidades básicas" y sólo aquellas que estén "dentro de los límites del planeta". Los que Sumar considere oportunos en cada momento.
Y, por supuesto, según este documento, el Estado es el único legitimado para dirigir y liderar esa "transición ecológica de la economía" hacia un modelo "socialmente justo y solidario" en contraposición al modelo "elitista dirigido por el mercado".
El resto del texto es un brindis al sol sobre la reducción de emisiones, descarbonización, agricultura regenerativa, ganadería extensiva, consumo local o la promoción del "pastoralismo" para evitar incendios. Todo ello, a golpe de regulación y más intervención del Estado bajo los principios de "justicia social, consenso y eficacia".
Para Sumar no hay más camino que el ecosocialismo y todo aquel que cuestione el proyecto distópico de Yolanda Díaz queda etiquetado en el documento como un "negacionista" de "ultraderecha". La idea es gobernar a golpe de dogma climático ignorando por el camino evidencias económicas y apagones masivos.