
Lo ocurrido estos últimos días en la localidad murciana de Torre-Pacheco pone de manifiesto nuevamente cuáles son las consecuencias que, tarde o temprano, conlleva la inmigración ilegal y la delincuencia vinculada a ella. Violencia, okupación, agresiones y robos suelen ser algunas de las prácticas habituales de estos inmigrantes. En el caso de Torre-Pacheco, los disturbios han estallado después de que varios inmigrantes ilegales magrebíes agredieran el pasado miércoles a un anciano de 70 años.
Okupas en Torre-Pacheco
En este contexto, hemos podido comprobar cuál es la situación de la okupación en Torre-Pacheco gracias a la herramienta implementada por Idealista en su página web con la que podemos identificar en qué inmuebles se encuentran viviendo estas personas. Como informamos en Libre Mercado, desde el pasado mes de enero el portal inmobiliario incluye en sus anuncios un apartado relacionado con la "situación de la vivienda", donde se pueden consultar las viviendas "ocupadas ilegalmente".
De este modo, vemos que en el caso de este municipio murciano hay al menos doce inmuebles okupados a la venta. Precisamente por ello, los precios de estos inmuebles son más reducidos, puesto que quienes inviertan en estas viviendas tendrán que hacer frente a costes adicionales, tanto por la reforma necesaria como por el proceso judicial que tendrán que llevar a cabo para expulsar a los okupas. De hecho, por este motivo en todos estos anuncios se detalla que estos inmuebles son oportunidades para los inversores, dados los grandes costes que implica la okupación y porque un particular que desee residir en estas viviendas no podrá hacerlo mientras estas personas permanezcan allí.
Tal es así que, salvo una excepción en la que se piden 115.000 euros por un chalet de 119 metros cuadrados, en la mayoría de los casos el precio de las viviendas (que tienen incluso más metro cuadrados) no supera los 95.000 euros, siendo el precio más bajo de 44.000 euros por un piso de 71 metros cuadrados.
Entre estos anuncios encontramos, por ejemplos, algunos en los que se piden 81.000 euros por un chalet adosado de 116 metro cuadrados que cuenta con tres habitaciones. También encontramos otro piso por casi 65.000 euros que cuenta con cuatro habitaciones y tiene 124 metro cuadrados.
Asimismo, por otros inmuebles se pide 58.300 euros, con una superficie de más de 120 metro cuadrados y tres habituales. Este mismo precio ronda otro chalet de en el que también viven okupas y que cuenta con cuatro habitaciones y casi 100 metro cuadrados de superficie, por el que se pide 56.000 euros.
Crisis de la vivienda
Así las cosas, el Gobierno parece ignorar una de las problemáticas más graves que actualmente sufre la población española. De hecho, cabe recordar que el Ejecutivo sanchista ha mostrado una especial connivencia con estos delincuentes a los que se ha protegido deliberadamente. En cambio, gracias a las políticas implementadas en materia de vivienda, los legítimos propietarios de los inmuebles han quedado totalmente desamparados.
Esta desprotección que sufren los propietarios, así como las restricciones impuestas sobre la iniciativa privada en el mercado inmobiliario, están disparando los precios de la vivienda en nuestro país. De acuerdo con los datos ofrecidos por Idealista sobre la evolución del precio de la vivienda en venta en España correspondientes al mes de junio, el precio del metro cuadrado se sitúa en los 2.438 euros. Esto implica un incremento del 2% frente al mes de mayo. Así las cosas, en términos anuales el precio de la vivienda en venta ha crecido en nuestro país un 14%. En comparación con enero de 2019, este incremento ha sido del 45,7%.
Del mismo modo, las cifras sobre la evolución del precio de la vivienda en alquiler en España demuestran que en el mes de junio el precio del metro cuadrado se situó en este período en los 14,6 euros. Así, se experimentó una subida del 1% en relación con el mes anterior. Del mismo modo, frente a junio de 2024, el precio de la vivienda en alquiler ha aumentado un 9,7%, siendo esta escalada del 46% respecto a enero de 2019.
Sin embargo, ante esta realidad, en lugar de señalar los verdaderos motivos que han ocasionado la actual crisis de la vivienda en España, el Gobierno de Pedro Sánchez prefiere culpar a los fondos buitre o a los pisos turísticos de un problema que tiene su raíz en el intervencionismo del Ejecutivo. Si se llevara a término la liberalización del suelo, se acabaran las restricciones impuestas sobre la iniciativa privada y se protegieran los derechos de propiedad, veríamos que los desequilibrios entre la oferta y la demanda de vivienda se irían eliminando, reduciendo sus precios y facilitando el acceso a un inmueble a las personas con menos recursos.

