
El Ministerio de Seguridad Social ha reculado en su propuesta de cuotas para los autónomos después de la lluvia de críticas con las que se encontró la semana pasada tras anunciar las nuevas cotizaciones con las que iba a golpear a este colectivo durante los próximos tres años.
Así lo anticipó Elma Saiz en una entrevista publicada a primera hora de la mañana de ayer lunes en El País. "Propondremos congelar en 2026 las cuotas de los autónomos que ganan menos" titulaba el diario de Prisa.
Horas después de que la entrevista saliera a la luz, el Ejecutivo rectificaba su plan de aumentar la cuota a todos los trabajadores por cuenta propia y que contemplaba subidas de cotizaciones que irían desde los 17,37 euros al mes en 2026 hasta la friolera de los 206,24 euros para el último de los tramos de rendimientos de los autónomos.
Así, el departamento de Saiz volvía a elaborar una nueva tabla que congela las cuotas de los autónomos de menores ingresos (de 670 a 1.166,7 euros al mes) y eleva el resto de pagos a la Seguridad Social entre 2,5 y 14,75 euros mensuales para el año que viene, lo que supone una reducción considerable ante la subida de cuotas inicial (aunque subida va a haber).
Dudosas declaraciones
Sin embargo, Elma Saiz dejaba algunas imprecisas y dudosas declaraciones en El País sobre este giro de 180 grados a las cotizaciones de los autónomos que asestó su predecesor, José Luis Escrivá, en el año 2023.
Hasta entonces, el autónomo podía decidir en la base en la que quería tributar, y casi el 80% de los autónomos físicos elegía hacerlo por la base mínima. Es decir, preferían pagar menos impuestos aunque eso implicara menos coberturas estatales. Con el cambio del Gobierno, los autónomos empezaron a cotizar en función de los rendimientos que obtengan cada año.
Así, todos los autónomos que han obtenido ingresos netos superiores a 1.700 euros al mes llevan pagando más cuota desde 2023, donde ese ejercicio ya vieron su cuota incrementarse en 16 euros al mes (192 euros al año), y lo mismo ocurrió con los siguientes tramos. Los que obtuvieron ingresos por debajo de esa cifra han venido pagando lo mismo o menos que antes. Por tanto, con esta medida se penaliza la generación de ingresos y de riqueza.
Niega el afán recaudatorio
Según lleva años insistiendo el Ministerio de Seguridad Social, el efecto de este cambio radical en el régimen de autónomos sobre la recaudación del sistema iba a ser "neutral". Es decir, que lo que se recaudara extra por unos autónomos a los que se les subirá la cuota se compensaría con lo que se recaudara de menos por los que tendrán cuotas más bajas.
Ahora, Saiz vuelve a negar que "su primera propuesta para reformar el modelo de cotización" tuviera "afán recaudatorio". Según la socialista, "rotundamente no es así; no hay un interés recaudatorio. Todo lo que acabo de exponer demuestra que lo que hay detrás es una equiparación de derechos y protección social. Pero además es que, después de la primera regularización hemos visto que la recaudación se ha quedado prácticamente plana y entendemos que seguirá en esa línea" respondió.
Sin embargo, como ya publicamos en Libre Mercado, el Gobierno sí prometió a Bruselas ampliar los ingresos con el nuevo sistema de cotización de los autónomos en el Plan de recuperación, transformación y resiliencia. Según sus cálculos, la reforma que establece un nuevo sistema de cotización de autónomos, supone un aumento estimado de ingresos en 2050 del 0,6% del PIB" aseguraban en el texto, que recoge todas las previsiones de aumento de ingresos que pretende anotarse la Seguridad Social gracias a los autónomos desde 2026 a 2070.
Bien es cierto que entre 2023 y 2025 los ingresos por cotizaciones de los autónomos sólo han sufrido una ligera subida en estos ejercicios, como apunta la ministra, aunque los cálculos que había hecho ATA sobre el efecto de su nueva propuesta para los próximos tres años era demoledor. Se produciría un incremento de la recaudación por cotizaciones de los autónomos de más de 5.700 millones de euros. Por tanto, el afán recaudatorio aquí es evidente.

Así, la propuesta del Gobierno de la semana pasada pone de manifiesto la necesidad de obtener más ingresos por cotizaciones de todos los colectivos para afrontar el cada vez más elevado gasto en pensiones.
En este sentido, preguntada por si "no es paradójico que se esté llenando la hucha (de las pensiones) con el abultado déficit contributivo de la Seguridad Social", la ministra defiende los tres palos al trabajo que Escrivá ha asestado en estos tres años.
"Todavía se están desplegando partes de la reforma, como la cuota de solidaridad y el Mecanismo de Equidad Intergeneracional. El sistema es un todo. Vienen de otros países a pedirnos la receta, a saber cómo se ha desplegado nuestro sistema de pensiones" responde. La receta no es más que nuevas cotizaciones para empresas, empleados y autónomos, así como una nueva penalización a los sueldos anuales. Con eso están llenando la hucha de las pensiones y aún así todavía no será suficiente para asumir el gasto de estas prestaciones.




