Las autoridades locales de Bo, la segunda ciudad más grande de Sierra Leona, están ofreciendo becas de cinco años a las estudiantes si se comprometen a mantener su virginidad hasta su graduación.
El proyecto pretende reducir los embarazos en las adolescentes, y según el presidente del consejo de la ciudad, Mathew Margao, el objetivo es asegurar que al menos el 80% de las niñas vayan a la escuela manteniendo su virginidad hasta que terminen su vida educativa. Ante la cuestión de cómo van a saber si las niñas son realmente vírgenes, el político sierraleonés respondió que el consejo va a contratar los servicios de personal médico femenino, que "demostraría la autenticidad de la virginidad de las niñas".
Según informa News24, el plan ‘Virgin Scholarships’ (Beca Virgen) ha sido criticado por padres y grupos de los derechos civiles. El portavoz local de la ONG Women’s Rights, Abibatu Mansaray, dijo que la medida "raya en la violación de los derechos humanos de las niñas". Para Mansaray, la ‘beca virgen’ no es la forma adecuada de llamar la atención sobre el tema del embarazo adolescente.
Por su parte, UNICEF muestra que Sierra Leona es uno de los países más peligrosos del mundo para las embarazadas y los recién nacidos: un total de 495 de 100.000 mujeres fallece durante el alumbramiento, mientras que 267 de cada 1.000 nacidos muere antes de cumplir cinco años de edad. Además, sólo el 15% de las niñas sierraleonesas llegan a cursar la escuela secundaria.
En el distrito de Koinadugu, en el norte del país, se introdujo hace unos años un proyecto similar a la ‘beca virgen’, pero fue desechado rápidamente. Otra localidad aprobó leyes para exigir que, cuando una alumna se queda embarazada, tanto ella como el padre tengan que abandonar la escuela.