LD (Agencias)
El Ministerio de Defensa de Japón ha anunciado que el régimen comunista de Pyongyang ha lanzado desde el sur de la provincia de Pyongan, un misil tierra-mar de corto alcance aunque capaz de transportar ojivas nucleares. El proyectil hizo blanco en un área al noroeste sobre el Mar Amarillo. El misil, según las primeras informaciones, tiene un alcance de sesenta kilómetros, aunque las autoridades japonesas están aún confirmando los detalles del incidente. Las autoridades indicaron que la información les fue proporcionada por EEUU.
Según el Gobierno japonés, a diferencia de los dos anteriores (el pasado 24 de febrero y el 10 de marzo), esta vez el misil no fue lanzado sobre el Mar de Japón, al este de la península coreana, sino hacia las costas occidentales norcoreanas. El ministerio de Asuntos Exteriores de Tokio afirmó que el lanzamiento no supondrá una amenaza seria a la seguridad de Japón y añadió que el misil podría ser una versión del misil no balístico de fabricación china "Silkworm", al igual que en los dos casos anteriores. Así, las autoridades niponas han reaccionado con relativa calma, al igual que en las ocasiones anteriores, y aunque calificó de "indeseable" el incidente, indicó que el misil no iba dirigido a Japón y no violaba la Declaración de Pyongyang firmada el pasado mes de septiembre entre los líderes de ambos países.
En dicha Declaración, el régimen norcoreano expresó su intención de ampliar la moratoria sobre el lanzamiento de misiles balísticos más allá de 2003. Sin embargo, la cancillería nipona instó al régimen norcoreano a "detener este tipo de acciones" y volver a la mesa de negociaciones.
El incidente ocurre cuatro días después de que Japón lanzara dos satélites espías a la órbita terrestre con el supuesto fin de vigilar el programa nuclear norcoreano y sus imprevistos lanzamientos experimentales de misiles. Corea del Norte reaccionó a los lanzamientos de forma negativa y después de calificarlos de "acto hostil" acusó a Japón de haber violado la Declaración de Pyongyang.
Según el Gobierno japonés, a diferencia de los dos anteriores (el pasado 24 de febrero y el 10 de marzo), esta vez el misil no fue lanzado sobre el Mar de Japón, al este de la península coreana, sino hacia las costas occidentales norcoreanas. El ministerio de Asuntos Exteriores de Tokio afirmó que el lanzamiento no supondrá una amenaza seria a la seguridad de Japón y añadió que el misil podría ser una versión del misil no balístico de fabricación china "Silkworm", al igual que en los dos casos anteriores. Así, las autoridades niponas han reaccionado con relativa calma, al igual que en las ocasiones anteriores, y aunque calificó de "indeseable" el incidente, indicó que el misil no iba dirigido a Japón y no violaba la Declaración de Pyongyang firmada el pasado mes de septiembre entre los líderes de ambos países.
En dicha Declaración, el régimen norcoreano expresó su intención de ampliar la moratoria sobre el lanzamiento de misiles balísticos más allá de 2003. Sin embargo, la cancillería nipona instó al régimen norcoreano a "detener este tipo de acciones" y volver a la mesa de negociaciones.
El incidente ocurre cuatro días después de que Japón lanzara dos satélites espías a la órbita terrestre con el supuesto fin de vigilar el programa nuclear norcoreano y sus imprevistos lanzamientos experimentales de misiles. Corea del Norte reaccionó a los lanzamientos de forma negativa y después de calificarlos de "acto hostil" acusó a Japón de haber violado la Declaración de Pyongyang.