L D (Agencias)
El salto del ex general Wesley Clark a la política, que se daba por hecho, va a fraccionar todavía más al Partido Demócrata pero a cambio puede revitalizar la contienda al aportar un programa diferente al que muestran los otros nueves aspirantes. Clarke ha sido abiertamente crítico con la guerra de Irak y es duro en sus opiniones sobre George Bush. El ex general ha justificado su salto a la política asegurando que “este país necesita un liderazgo fuerte y visionario para poder avanzar, y eso es la que me lleva a presentarme”.
Cuenta también con el apoyo de Bill Clinton, su amigo personal, y de Al Gore; los dos dicen estar ajenos al proceso de nominación pero su peso en el partido puede ser definitivo a la hora de escoger al candidato. Muchos analistas políticos creen que sólo hay dos personas en EEUU capaces de arrebatar la presidencia a Bush en noviembre del año próximo. Una ya ha dicho que no se presenta, Hillary Clinton. La otra era Wesley Clarke, que actualmente tiene una empresa de consultoría política y es también analista en la nómina de la cadena de televisión CNN.
Cuenta también con el apoyo de Bill Clinton, su amigo personal, y de Al Gore; los dos dicen estar ajenos al proceso de nominación pero su peso en el partido puede ser definitivo a la hora de escoger al candidato. Muchos analistas políticos creen que sólo hay dos personas en EEUU capaces de arrebatar la presidencia a Bush en noviembre del año próximo. Una ya ha dicho que no se presenta, Hillary Clinton. La otra era Wesley Clarke, que actualmente tiene una empresa de consultoría política y es también analista en la nómina de la cadena de televisión CNN.
