L D (Agencias) "Por lo que a nosotros respecta, se trata de los derechos del pueblo. Si, Dios no lo quiera, sentimos que esos derechos no pueden ser respetados, no organizaremos las elecciones", afirma Mobalagh, insistiendo en que si no se siente capaz de organizar unos comicios "libres y respetuosos con el derecho", la Comisión, con él "a la cabeza", no lo hará.
Las declaraciones del viceministro del Interior suponen un paso más en la crisis entre conservadores y reformistas desatada el pasado domingo con la anulación de unas 3.600 candidaturas de los reformadores próximos al presidente Mohamed Jatami, incluyendo las de 83 diputados salientes.
La mayor parte de los candidatos fueron rechazados por "no respetar el Islam". Los reformistas han calificado este movimiento de "golpe de Estado" de los conservadores, que siguen controlando las instancias judiciales. El pasado miércoles, el Guía Espiritual de la República, el ayatolá Jamenei, ordenó al Consejo que reexaminara los dosieres con menos severidad.
