L D (EFE) El ataque se produjo cuando el convoy en que iba Gedi se dirigía desde el aeropuerto de Eseley hasta el hotel en que se alojaba.
Gedi visitaba por primera vez la capital del país desde el 3 de mayo, cuando se registró una explosión en un acto político en el que estaba tomando parte. Según la versión oficial, una granada que estalló accidentalmente se cobró la vida de 20 personas.
Gedi visitaba por primera vez la capital del país desde el 3 de mayo, cuando se registró una explosión en un acto político en el que estaba tomando parte. Según la versión oficial, una granada que estalló accidentalmente se cobró la vida de 20 personas.
Un residente del área donde se produjo la explosión (Huriwa) declaró a la agencia EFE que, tras la explosión, los milicianos que acompañaban al primer ministro hicieron fuego.
"Quedamos traumatizados cuando oímos la explosión, y vimos cómo ascendía el humo", dijo Anfa Amin Ahmed. Asimismo, afirmó haber visto al menos a cinco heridos, y que habían muerto varias personas que se encontraban en un kiosko de las inmediaciones, que quedó completamente destruido.
El primer ministro había llegado días antes a la capital para explicar a sus habitantes los planes oficiales para el traslado al país de las nuevas autoridades desde la vecina Kenia, donde fueron elegidas el año pasado.
Somalia vive en medio del caos y sin un Gobierno central desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré. El país es escenario de luchas entre los diferentes "señores de la guerra", que se disputan el control del territorio.
Los integrantes del Gobierno y del Parlamento han comenzado a instalarse en Somalia en los últimos meses, pero no han podido garantizar todavía la seguridad a causa de las decenas de miles de milicianos que se mantienen activos.
Existen fuertes divisiones entre las autoridades; entre quienes quieren instalar el Gobierno y el Parlamento en ciudades distintas a Mogadiscio, como el primer ministro, y aquellos "señores de la guerra" que también son ministros y parlamentarios que quieren que se instalen en la capital.
"Quedamos traumatizados cuando oímos la explosión, y vimos cómo ascendía el humo", dijo Anfa Amin Ahmed. Asimismo, afirmó haber visto al menos a cinco heridos, y que habían muerto varias personas que se encontraban en un kiosko de las inmediaciones, que quedó completamente destruido.
El primer ministro había llegado días antes a la capital para explicar a sus habitantes los planes oficiales para el traslado al país de las nuevas autoridades desde la vecina Kenia, donde fueron elegidas el año pasado.
Somalia vive en medio del caos y sin un Gobierno central desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré. El país es escenario de luchas entre los diferentes "señores de la guerra", que se disputan el control del territorio.
Los integrantes del Gobierno y del Parlamento han comenzado a instalarse en Somalia en los últimos meses, pero no han podido garantizar todavía la seguridad a causa de las decenas de miles de milicianos que se mantienen activos.
Existen fuertes divisiones entre las autoridades; entre quienes quieren instalar el Gobierno y el Parlamento en ciudades distintas a Mogadiscio, como el primer ministro, y aquellos "señores de la guerra" que también son ministros y parlamentarios que quieren que se instalen en la capital.
Gedi y el presidente de Somalia, Abdulá Yusuf Ahmed, establecieron el Gobierno en Jowhar, 90 kilómetros al noroeste de Mogadiscio, tras considerar que la capital era demasiado insegura.