LD (EFE) Al menos cinco personas, entre ellas tres periodistas, permanecen detenidas y bajo interrogatorio después de que fueran arrestadas durante una manifestación realizada el jueves pasado cerca de la pagoda de Sule, en Rangún. La Junta Militar de Birmania ha advertido mediante la prensa oficial de que no tolerará más protestas callejeras.
El diario oficial New Ligth of Myanmar publica en su última edición que "la protesta que infringió la ley fue llevada a cabo por un grupo con la intención de levantar a la gente contra el Gobierno y provocar disturbios".
Cerca de una veintena de personas tomaron parte en la protesta llevada a cabo cerca de la pagoda de Sule, en Yangón, para pedir al régimen la adopción de medidas que consigan frenar la subida de los precios de los alimentos básicos, y exigir mejor educación. Al menos cinco personas, entre ellas tres periodistas birmanos, fueron detenidas por la Policía durante la manifestación, que apenas duró media hora.
Las protestas en Birmania contra el Gobierno son muy raras, y cuando se producen, son por lo general rápidamente acalladas por las fuerzas de seguridad. A finales del pasado mes de enero, varias decenas de seguidores del régimen militar se manifestaron frente a las embajadas de EEUU y del Reino Unido para denunciar los esfuerzos de los dos países, con el fin de que el Consejo de Seguridad de la ONU aprobase una resolución de condena de los abusos de derechos humanos cometidos por el Gobierno birmano.