
L D (EFE) Irán ha amenazado con interrumpir las inspecciones voluntarias de su programa nuclear de parte de la AIEA, si se le denuncia ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que tiene potestad sancionadora. Según un primer borrador de la resolución que quiere presentar la UE-3 a la Junta, no se amenaza directamente con sanciones, sino que pretende ampliar el mandato de la AIEA en sus inspecciones en Irán, indicaron este miércoles fuentes cercanas al organismo en Viena.
La más reciente escalada de la tensión en el contencioso nuclear se debe a la decisión de Teherán de reanudar los trabajos de investigación científica relacionados con su programa de enriquecimiento de uranio, suspendido durante más de dos años para facilitar una solución diplomática del conflicto.
Las actividades de Irán son legales bajo el Tratado de No Proliferación de armas nucleares (TNP) y, según la AIEA, los planes de Teherán prevén enriquecer pequeñas cantidades de uranio. Ese material es especialmente sensible, ya que se usa para producir combustible nuclear para reactores de energía eléctrica, pero sirve también para construir bombas atómicas si su grado de pureza es elevado hasta más del 90 por ciento.
El camino para una denuncia de Irán ante el Consejo de Seguridad fue allanado en una resolución de la Junta de la AIEA, adoptada el pasado 24 de septiembre, en la que se constata que Teherán incumplió sus obligaciones de salvaguardas (controles). Eso requiere, según el estatuto del organismo internacional, una denuncia ante el órgano máximo de Naciones Unidas.
El pasado martes, el Gobierno iraní había ofrecido retomar este miércoles en Viena las negociaciones con la UE3, petición rechazada de inmediato por Londres como "vacía de sentido". También Francia excluyó el retorno a la mesa de negociaciones, mientras ese país no suspenda del todo sus actividades atómicas sensibles.
Por su parte, el embajador iraní en Moscú, Gholam Reza Ansari, señaló este miércoles que Irán consideraría un acto "hostil" un debate de su controvertido programa nuclear en el seno del Consejo de Seguridad. "Los promotores de esta iniciativa desean minar la estabilidad en la región. Ese es un camino oscuro y tenebroso", declaró el embajador en una entrevista con la emisora de radio Eco de Moscú. Estados Unidos y la UE sospechan que Irán quiere usar sus conocimientos nucleares para construir armas atómicas, algo que Teherán rechaza con el argumento de que sus intenciones son sólo pacíficas como la generación de energía eléctrica.
La más reciente escalada de la tensión en el contencioso nuclear se debe a la decisión de Teherán de reanudar los trabajos de investigación científica relacionados con su programa de enriquecimiento de uranio, suspendido durante más de dos años para facilitar una solución diplomática del conflicto.
Las actividades de Irán son legales bajo el Tratado de No Proliferación de armas nucleares (TNP) y, según la AIEA, los planes de Teherán prevén enriquecer pequeñas cantidades de uranio. Ese material es especialmente sensible, ya que se usa para producir combustible nuclear para reactores de energía eléctrica, pero sirve también para construir bombas atómicas si su grado de pureza es elevado hasta más del 90 por ciento.
El camino para una denuncia de Irán ante el Consejo de Seguridad fue allanado en una resolución de la Junta de la AIEA, adoptada el pasado 24 de septiembre, en la que se constata que Teherán incumplió sus obligaciones de salvaguardas (controles). Eso requiere, según el estatuto del organismo internacional, una denuncia ante el órgano máximo de Naciones Unidas.
El pasado martes, el Gobierno iraní había ofrecido retomar este miércoles en Viena las negociaciones con la UE3, petición rechazada de inmediato por Londres como "vacía de sentido". También Francia excluyó el retorno a la mesa de negociaciones, mientras ese país no suspenda del todo sus actividades atómicas sensibles.
Por su parte, el embajador iraní en Moscú, Gholam Reza Ansari, señaló este miércoles que Irán consideraría un acto "hostil" un debate de su controvertido programa nuclear en el seno del Consejo de Seguridad. "Los promotores de esta iniciativa desean minar la estabilidad en la región. Ese es un camino oscuro y tenebroso", declaró el embajador en una entrevista con la emisora de radio Eco de Moscú. Estados Unidos y la UE sospechan que Irán quiere usar sus conocimientos nucleares para construir armas atómicas, algo que Teherán rechaza con el argumento de que sus intenciones son sólo pacíficas como la generación de energía eléctrica.
