LD (Agencias)
El Gobierno norcoreano amenazó seriamente a Japón, quien podría lanzar un satélite espía. Paralelamente, el periódico oficial del régimen comunista,
Rodong Sinmun
, recalcó de nuevo que la solución a la crisis nuclear debe llegar a través de conversaciones bilaterales directas con EEUU y sobre la base de unos “principios de imparcialidad e igualdad”. El rotativo insistió en que el causante del conflicto nuclear es EEUU y por ello rechazó la solución multilateral y la intervención de la comunidad internacional en el asunto.
En el contexto de la crisis coreana, el ministro surcoreano de Asuntos Exteriores, Yoon Young Kwan, partió hacia EEUU, donde tiene previsto mantener una entrevista con el secretario norteamericano de Estado, Colin Powell, para discutir sobre el programa de desarrollo nuclear norcoreano. Durante su estancia en Washington, que durará hasta el sábado próximo, Yoon también se entrevistará con el vicepresidente Dick Cheney, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, y la asesora para la Seguridad Nacional, Condoleezza Rice.
Según la cancillería surcoreana, la visita tendrá lugar en un momento en el que Seúl teme que el rechazo norcoreano a las exigencias de la comunidad internacional para que desmantele su programa de desarrollo nuclear pueda aumentar las tensiones militares en la península una vez concluida la guerra en Irak. Se espera que las conversaciones entre Yoon y Powell incluyan el asunto del traslado de las tropas estadounidenses estacionadas en Corea del Sur, así como la visita del presidente surcoreano, Roh Moo Hyun, a EEUU para celebrar una cumbre con su colega, George Bush.
La actual crisis norcoreana estalló el pasado octubre cuando el régimen de Pyongyang supuestamente reconoció a EEUU que poseía un programa secreto de desarrollo nuclear. Desde entonces, en medio de una escalada de tensión en la península coreana, el Gobierno de Washington ha reforzado su presencia militar en el Océano Pacífico, especialmente en la isla de Guam, y ha introducido portaaviones nuevos en Corea del Sur, necesarios para las maniobras militares que ambos países llevan a cabo de forma conjunta.
Al tiempo que EEUU abría un frente en Irak para la guerra, Washington decidió fortalecer su presencia militar en la península como medida disuasoria de cara al país comunista.
En el contexto de la crisis coreana, el ministro surcoreano de Asuntos Exteriores, Yoon Young Kwan, partió hacia EEUU, donde tiene previsto mantener una entrevista con el secretario norteamericano de Estado, Colin Powell, para discutir sobre el programa de desarrollo nuclear norcoreano. Durante su estancia en Washington, que durará hasta el sábado próximo, Yoon también se entrevistará con el vicepresidente Dick Cheney, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, y la asesora para la Seguridad Nacional, Condoleezza Rice.
Según la cancillería surcoreana, la visita tendrá lugar en un momento en el que Seúl teme que el rechazo norcoreano a las exigencias de la comunidad internacional para que desmantele su programa de desarrollo nuclear pueda aumentar las tensiones militares en la península una vez concluida la guerra en Irak. Se espera que las conversaciones entre Yoon y Powell incluyan el asunto del traslado de las tropas estadounidenses estacionadas en Corea del Sur, así como la visita del presidente surcoreano, Roh Moo Hyun, a EEUU para celebrar una cumbre con su colega, George Bush.
La actual crisis norcoreana estalló el pasado octubre cuando el régimen de Pyongyang supuestamente reconoció a EEUU que poseía un programa secreto de desarrollo nuclear. Desde entonces, en medio de una escalada de tensión en la península coreana, el Gobierno de Washington ha reforzado su presencia militar en el Océano Pacífico, especialmente en la isla de Guam, y ha introducido portaaviones nuevos en Corea del Sur, necesarios para las maniobras militares que ambos países llevan a cabo de forma conjunta.
Al tiempo que EEUU abría un frente en Irak para la guerra, Washington decidió fortalecer su presencia militar en la península como medida disuasoria de cara al país comunista.
