Talgo cifra en unos 2.007 millones de euros los ingresos que le reportará su participación en el contrato de construcción y posterior explotación del AVE La Meca-Medina, importe equivalente a alrededor del 30% del volumen total de 6.736 millones de euros al que asciende el proyecto.
La compañía será la encargada de fabricar, suministrar y posteriormente mantener 35 trenes AVE para este corredor, a los posteriormente se sumarán 23 trenes más.
Talgo fabricará estos vehículos en la planta con que cuenta en Álava. Se trata del 'Talgo 350', un tren de 'muy alta velocidad', conocido como 'El Pato' por la forma de su cabeza tractora, y que ya circula en España en los corredores que unen Madrid con Málaga, Valencia y Valladolid.
En un comunicado, la compañía que preside Carlos Palacio Oriol destacó el "hito" que este contrato supone para la industria y la tecnología ferroviaria española y la estrategia de internacionalización de Talgo. Asimismo, estima que que constituye una "plataforma para futuros proyectos de AVE internacionales".
En cuanto al resto de empresas españolas que conforman el consorcio adjudicatario del proyecto, cuyo contrato se firmó este sábado en Riad, son las públicas Renfe, Adif e Ineco, además de las privadas Copasa, OHL, Cobra (ACS), Dimetronic, Indra, Imathia, Inabensa y Consultrans.
La participación en el proyecto de Renfe, que consiste en la explotación del AVE una vez esté construido, reportará a la operadora pública ingresos de unos 671 millones de euros. La cartera de ingresos prevista para Adif es de 399,7 millones, mientras que la correspondiente a Ineco se cifra en 139 millones.
En cuanto a las firmas privadas, Copasa realizará obras valoradas en 639 millones de euros, OHL ejecutará trabajos por 586 millones, Cobra por otros 524 millones e Indra por 433 millones. Asimismo, la participación de Dimetronic se estima en 493 millones, la de Imathia en 208 millones, la de Inabensa en 131,71 millones y la de Consultrans en 88,8 millones.
El contrato consiste en el montaje de la línea ferroviaria de Alta Velocidad de unos 450 kilómetros de longitud entre La Meca y Medina, además de la instalación de los sistemas de señalización y telecomunicaciones, la electrificación y el centro de operaciones y control.
El AVE unirá estas dos ciudades en menos de dos horas y media, con lo que aportará nuevas opciones de viaje a los millones de peregrinos que cada año visitan las ciudades santas del Oeste del país. Se calcula que transportará a unos sesenta millones de pasajeros anuales, con una demanda diaria potencial de unos 166.000 viajeros.