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Cosidó dice que los islamistas detenidos "eran una amenaza de primer orden"

Asegura que la promoción interna es "un eje esencial" de la política de la Dirección General. (Volver)

fulman dijo el día 28 de Junio de 2012 a las 16:59:02:

Orates, solo para complementar tu comentario... el hecho de que un musulman pueda no cumplir los preceptos del islam para pasar desapercebido por los "infieles" se llama al-taqiyya.

Orates dijo el día 28 de Junio de 2012 a las 14:11:58:

Según el ministro del Interior ""son personas capaces de cometer atentados de una especial brutalidad y que están sometidos a una especialísima y radical ortodoxia doctrinal, similar, análoga y la misma que tenían los que se inmolaron en Leganés en 2004".

Pertenecen al grupo Takfir Wal Hijra (Anatema y Exilio), considerado como una de las sectas más radicales del yihadismo. Se da la particularidad de que los miembros de este grupo pueden no cumplir los preceptos del Islam a fin de pasar desapercibidos en los entornos occidentales. Así pueden vestir ropas occidentales, no llevar barba, beber alcohol, fumar o comer cerdo.

Las investigaciones policiales señalan al sirio-español Abu Dahdah
uno de los más destacados miembros de Al Qaeda en Europa y España y condenado a 12 años de cárcel por pertenencia a organización terrorista, como miembro de esta secta.

Da la casualidad de que Abu Dahdah conocía bien a Jamal Zougam, dueño del locutorio "Nuevo Siglo" y condenado por los atentados del 11-M. El considerado jefe de Al Quaeda en España visitaba con frecuencia el locutorio de Zougam y tomaba el té con él en el bar Alhambra de Lavapiés. Se veían con frecuencia y tenían muchos amigos comunes.

Cuando el domicilio de Zougam fue registrado a raíz de una comisión rogatoria francesa, en el curso de las actuaciones del juez Baltasar Garzón contra la célula española de Al Qaeda, se le encontraron los teléfonos de Abdulrahman Alarnaot Abualjer, Amer Azizi y Said Chedadi, miembros de la célula de Abu Dahdah.

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