L D (EFE)
Eduardo Tamayo, uno de los dos diputados electos que fueron expulsados del PSOE tras ausentarse voluntariamente de la Asamblea dejando en minoría a su partido e IU, negó que su decisión se debiera a "sobornos o razones personales" y aseguró que nunca ha pedido un cargo "ni lo voy a pedir". En una entrevista realizada en Antena 3 Televisión, Tamayo esgrimió su "trayectoria de trabajo permanente y dedicación" al partido para negar ese extremo y rechazó que su acción se deba a "un afán de cobrar no sé qué cosas", porque -aseguró- él es quien "más ha combatido corruptelas en el seno de la FSM", que no detalló.
Tras reconocer que no ha "dormido bien" por la repercusión de sus actos, afirmó que "yo no quiero que el PP gobierne esta Comunidad si los electores no le dan el refrendo, pero también le digo que el PSOE no puede pensar que su programa electoral tenga que estar sometido a la posición de izquierda radicalizada de IU. Si ha de gobernar con el PSOE, que tenga la representación que le han dado". A las acusaciones de "traidor", "vendido" y "botarate", entre otras, con las que sus antiguos compañeros socialistas recibieron a Tamayo en su llegada a Antena 3, el diputado respondió que "entiendo que es una salida para desviar la atención de los electores" y reiteró que "no voy a permitir que el PSOE se venda a IU".
El diputado se desdijo que lo declarado el martes en el mismo medio de comunicación acerca de que su acción "representaba a un grupo de personas" que opinarían lo mismo que él y ahora matizó que "es una posición absolutamente personal", al tiempo que afirmó que los miembros de la corriente "renovadores de la base" a la que él y la diputada Maite Sáez pertenecían "es ajeno a toda esta situación". Reiteró que "una persona" le anticipó a Simancas lo que "podía suceder" en la Asamblea, aunque sin embargo al secretario de Organización del PSOE, José Blanco, con el que reconoció haberse entrevistado el lunes, no le habló de sus intenciones "en términos de ultimátum".
Pero una vez informado de que el líder socialista no le recibiría si no era para recogerle el acta de diputado, Tamayo concluyó que aunque "desea" apoyar la investidura de Simancas como Presidente de la Comunidad, "en estos momentos no puedo decir lo que haré". Adelantó que ingresará en el grupo mixto y declaró que "si no tengo cobijo en el grupo político en el que he salido elegido, no tengo otro remedio con el reglamento en la mano". Por último, dijo desconocer qué hará su compañera Maite Sáez.
Tras reconocer que no ha "dormido bien" por la repercusión de sus actos, afirmó que "yo no quiero que el PP gobierne esta Comunidad si los electores no le dan el refrendo, pero también le digo que el PSOE no puede pensar que su programa electoral tenga que estar sometido a la posición de izquierda radicalizada de IU. Si ha de gobernar con el PSOE, que tenga la representación que le han dado". A las acusaciones de "traidor", "vendido" y "botarate", entre otras, con las que sus antiguos compañeros socialistas recibieron a Tamayo en su llegada a Antena 3, el diputado respondió que "entiendo que es una salida para desviar la atención de los electores" y reiteró que "no voy a permitir que el PSOE se venda a IU".
El diputado se desdijo que lo declarado el martes en el mismo medio de comunicación acerca de que su acción "representaba a un grupo de personas" que opinarían lo mismo que él y ahora matizó que "es una posición absolutamente personal", al tiempo que afirmó que los miembros de la corriente "renovadores de la base" a la que él y la diputada Maite Sáez pertenecían "es ajeno a toda esta situación". Reiteró que "una persona" le anticipó a Simancas lo que "podía suceder" en la Asamblea, aunque sin embargo al secretario de Organización del PSOE, José Blanco, con el que reconoció haberse entrevistado el lunes, no le habló de sus intenciones "en términos de ultimátum".
Pero una vez informado de que el líder socialista no le recibiría si no era para recogerle el acta de diputado, Tamayo concluyó que aunque "desea" apoyar la investidura de Simancas como Presidente de la Comunidad, "en estos momentos no puedo decir lo que haré". Adelantó que ingresará en el grupo mixto y declaró que "si no tengo cobijo en el grupo político en el que he salido elegido, no tengo otro remedio con el reglamento en la mano". Por último, dijo desconocer qué hará su compañera Maite Sáez.
