L D (EFE)
El imán, que hacía escasamente cuatro meses que residía en Mataró, como sustituto del titular de la mezquita del barrio de Cerdañola, y que anteriormente había sido imán de la mezquita de Alcorcón (Madrid), fue detenido en el marco de la operación Nova II para la desarticulación de células terroristas islamistas, que dirige el juez Baltasar Garzón. El juez tiene previsto tomar declaración este miércoles al imán detenido.
"A Samir Ben Addellah lo contratamos hace cuatro meses cuando nuestro imán se rompió una pierna y necesitábamos un imán urgentemente, era una persona recomendada por el líder de la comunidad islámica del barrio de Rocafonda y sólo sabíamos de él que venia de Madrid", según declaró a Efe uno de los miembros de la Asociación Cultural Islámica Annour de esta mezquita, Kalen El Narbouh.
Según la misma fuente, en agosto el imán detenido se fue a Marruecos, su país natal, bajo el pretexto de visitar a su madre enferma del corazón, aunque su regreso se alargó hasta este pasado domingo después de que los miembros de la comunidad insistieran varias veces sobre su vuelta. Esta ausencia explicaría que la policía no haya podido detenerlo hasta ahora, pese a que desde el pasado 2 de noviembre recaía sobre él una orden de busca y captura dictada por Baltasar Garzón.
Por otra parte, miembros de otras comunidades musulmanas de Mataró, como la Asociación Cultural Musulmana Al Ouahda, aseguraron que este imán de 36 años de edad hacía bastante tiempo que residía en España y, aparte de Alcorcón (Madrid), también había dirigido comunidades de Bilbao y San Sebastián. En la noche de este martes la mezquita, ubicada junto a uno de los barrios con un índice más alto de inmigración en Mataró, ofició su oración vespertina sin ninguna muestra evidente de los últimos acontecimientos.
Según la misma fuente, en agosto el imán detenido se fue a Marruecos, su país natal, bajo el pretexto de visitar a su madre enferma del corazón, aunque su regreso se alargó hasta este pasado domingo después de que los miembros de la comunidad insistieran varias veces sobre su vuelta. Esta ausencia explicaría que la policía no haya podido detenerlo hasta ahora, pese a que desde el pasado 2 de noviembre recaía sobre él una orden de busca y captura dictada por Baltasar Garzón.
Por otra parte, miembros de otras comunidades musulmanas de Mataró, como la Asociación Cultural Musulmana Al Ouahda, aseguraron que este imán de 36 años de edad hacía bastante tiempo que residía en España y, aparte de Alcorcón (Madrid), también había dirigido comunidades de Bilbao y San Sebastián. En la noche de este martes la mezquita, ubicada junto a uno de los barrios con un índice más alto de inmigración en Mataró, ofició su oración vespertina sin ninguna muestra evidente de los últimos acontecimientos.