(Libertad Digital) En la semana en que Patxi López ha accedido a la presidencia del País Vasco, José Luis Rodríguez Zapatero no ha desperdiciado la ocasión de sacar rédito político al nuevo Gobierno autonómico. De paso, ha tratado de quitar mérito al PP. También ha hablado de ETA. Sin citar la negociación, ha aludido a algunos de sus principales protagonistas: Jesús Eguiguren, Rodolfo Ares, Alfredo Pérez Rubalcaba y el propio Patxi López.
"De pie y en actitud laica, Patxi López tomaba posesión como lehendakari", recordaba el presidente del Gobierno al comienzo del mitin. "Y todavía hemos oído decir a Aznar que el trabajo lo hizo Mayor Oreja… esta gente siempre es lo mismo, se apropian de los trabajos de los demás", continuó el presidente. "Él lo ha conseguido y otros lo intentaron", insistió Zapatero, para quien la causa de este triunfo es que "en el proyecto de Patxi cabe la idea de País Vasco que tiene Mayor Oreja y la que tiene Urkullu".
Entre constantes alabanzas a López, que asumió el cargo, insistió, "como un buen socialista, con la cabeza alta, con la mano tendida", afirmó que "para vivir este momento ha habido que trabajar duro, ha habido que arriesgar". En alusión a la negociación de la pasada legislatura y sin asomo de autocrítica, Zapatero ha afirmado que "hemos tenido que ser fuertes, valientes" y "aceptar descalificaciones e insultos". En este punto quiso reconocer "la tarea de los compañeros" en "defensa de la paz en Euskadi y por ver el final de ETA y la violencia" y citó expresamente a Jesús Eguiguren, Rodolfo Ares y Alfredo Pérez Rubalcaba".
"Sé muy bien todos los desvelos, todo el esfuerzo, toda la tarea por ver esa Euskadi de la convivencia", continuó Zapatero antes de aludir a quienes "durante cuatro años", según dijo, "usaron la crispación y la división" para convencer de que "íbamos a poner en cuestión la unidad de España". "Ahora, cuando se ven los resultados, hay que decir que mentían e insidiaban. Lo que hacíamos era hacer al país más fuerte, con cosas como ver a Patxi López de lehendakari", proclamó.
Al acto asistieron, según la organización, unas 15.000 personas, que aplaudieron a todos pero, en especial, a López. Los elogios llegaron también del escenario. Manuel Chaves, por ejemplo, aseguró que todos van a ayudarle "para que el día de mañana se le recuerde como el lehendakari que puso fin a la violencia y al terrorismo en Euskadi".
Después, invitó a subir a la tribuna al lehendakari, que, tras declararse "orgulloso" de ser socialista, se comprometió a trabajar "a favor de Euskadi" y no "contra nada ni contra nadie", entre gritos de "Ari, ari, ari, Patxi Lehendakari". Tampoco faltaron los gritos espontáneos de "valiente" y "campeón".
Tras nombrar a los dirigentes socialistas asesinados por ETA, Patxi López aseguró que luchará por "unir a la sociedad vasca" y trabajará por una sociedad en la que "quepan todos y sólo sobren los violentos y los terroristas".
