L D (EFE)
Los tribunales dictaron que el dirigente de la Mesa Nacional de Herri Batasuna debía abonar a Carlos Iturgaiz una indemnización de algo más de mil euros por verter amenazas contra él en una concentración celebrada en 1996. Con la entrega de esta cantidad, efectuada el pasado viernes, concluye el proceso judicial iniciado tras la concentración que se celebró el 17 de octubre de 1996 ante el domicilio de Iturgaiz en la localidad vizcaína de Portugalete.
En el transcurso de la protesta, Koldo Celestino anunció, dirigiéndose al dirigente popular, que “vamos a seguirle a todos los sitios a donde vaya” y “le vamos a machacar hasta que el machaque contra los presos políticos vascos no acabe”. Durante la vista oral que se celebró en Barakaldo hace dos años, el presidente del PP declaró que las manifestaciones de Celestino fueron “amenazas” que le provocaron “temor y preocupación” y que las “presiones del entramado HB-ETA” a partir de la concentración motivaron su cambio de domicilio y depresiones de su esposa.
En el transcurso de la protesta, Koldo Celestino anunció, dirigiéndose al dirigente popular, que “vamos a seguirle a todos los sitios a donde vaya” y “le vamos a machacar hasta que el machaque contra los presos políticos vascos no acabe”. Durante la vista oral que se celebró en Barakaldo hace dos años, el presidente del PP declaró que las manifestaciones de Celestino fueron “amenazas” que le provocaron “temor y preocupación” y que las “presiones del entramado HB-ETA” a partir de la concentración motivaron su cambio de domicilio y depresiones de su esposa.
