L D (Europa Press) En la reunión, de poco más de una hora, se constató el acuerdo de ambas partes en torno a la gestión de los puertos, donde la mayoría del consorcio se cedería a la Generalidad, y de los tres aeropuertos que no serían de interés general (Reus, Girona y Sabadell), que se traspasarían directamente.
Ahora bien, se mantuvo la discrepancia en cuanto al principal aeropuerto, el de Barcelona, donde el PSOE exige que "la mayoría decisoria" del consorcio colegiado se mantuviera en manos del Estado. "Los socialistas no entienden que en este tema las matemáticas no son exactas y que bajar del 100 al 51 por ciento no cambia las cosas", comentó el representante de CiU, Felip Puig. En la misma línea, el ponente de ERC, Joan Ridao, agregó que "es igual 100 que 51".
Así las cosas, los nacionalistas de CiU plantearon una contrapropuesta para que el consorcio se dividiera en tres partes iguales (el Estado, la Generalidad y la sociedad civil), de tal manera que nadie tuviera la mayoría y que el presidente y el director del aeropuerto fueran nombrados por consenso entre las dos administraciones. Según CiU, esta alternativa podría "desbloquear" la situación, aunque ERC e ICV siguen prefiriendo el 51 por ciento para la Generalidad. Pero en cualquier caso, el PSOE tampoco lo ha aceptado.
Antes de que se reanuden los debates en la Comisión Constitucional sobre las competencias de la Generalidad, los socialistas se reunirán a primera hora de mañana con nacionalistas e ICV para preparar la sesión y tratar de resolver los puntos de este Título IV que la Ponencia no dejó resueltos. En este contexto, Puig criticó el "poco interés" del PSOE por avanzar en relación con el aeropuerto de El Prat y dijo que supone una "piedra en el camino" que podría afectar a la "velocidad de crucero" del Estatuto. "No sabemos si sólo va a afectar a la velocidad del Estatuto", proclamó. Al ser preguntado si podría hacer que CiU reconsiderara el sentido de su voto, señaló que "no descarta nada" porque es "un tema muy importante y singular".
En fuentes nacionalistas se indicó a Europa Press que, sin cerrar la gestión del aeropuerto de Barcelona, el resto de tramitación del Estatuto puede ser "un vía crucis" porque las demás competencias pendientes, que debían resolverse mañana en el Congreso, vuelven ahora a cobrar categoría política y CiU no descarta trasladar sus discrepancias también al Senado. Todo ello haría imposible los planes de Pasqual Maragall de convocar el referéndum en junio.
También Ridao censuró la "cerrazón" del PSOE y se mostró "escéptico" con la posibilidad de cerrar un acuerdo sobre El Prat, lo que podría llevar a que este desacuerdo volviese a la Ponencia, retrasando así hasta octubre la tramitación de la reforma y por ende su aprobación en referéndum. "El PSOE tiene que dilucidar si le interesa alargar este tema", recalcó.
Joan Herrera, de Iniciativa per Catalunya (ICV), expresó su "sorpresa" por la actitud del PSOE y afirmó que ya son varios los aspectos que se "complican" y que hay "muchas cosas abiertas", lo que puede suponer que "el proceso se dilate". "Apelamos al sentido de responsabilidad del PSOE", enfatizó.
El PSOE, por boca de Daniel Fernández, coordinador de los diputados del PSC en el Congreso, mantuvo el "optimismo" y su confianza en que al final habrá acuerdo, ya que a su juicio la importancia no está en quién detenta la mayoría del consorcio, sino en el compromiso de acordar entre ambas administraciones las competencias aeroportuarias transferidas. "Centrar el debate en los porcentajes de participación no es la vía de encontrar una solución", señaló.