(Libertad Digital) El portavoz del PP, Eduardo Zaplana, se preguntó "dónde está la barbaridad" y "dónde la exageración" de sus interpelaciones, con el papel en la mano. "De dónde se puede interpretar que damos credibilidad a los asesinos", insistió Zaplana aludiendo a la iniciativa inédita de esta mañana. "Hechos como el de hoy son insólitos", dijo el dirigente popular, que recordó que "para encontrar algo similar hay que remontarse al Pacto Constitucional previo a la Carta Magna.
"Ese disco ya lo hemos escuchado", insistió, en alusión a las palabras del portavoz socialista. Y recordó otros momentos en que la oposición ha exigido explicaciones al Gobierno por informaciones aparecidas en prensa o personas con responsabilidades en las instituciones que el PSOE y sus socios dicen defender. En concreto, habló de las exigencias de López Garrido en temas como el GAL, cuando era diputado de IU.
"Vamos a seguir exigiendo información"
"La rueda de prensa de hoy la dio en esos terminos hace unos años", dijo, y recordó que "criticó al PSOE por utilizar la técnica de la tinta del calamar". "Pedía colaboración con la justicia y denunciaba la hostilidad" del Gobierno "a estas investigaciones". "Decía", continuó, que "en política, quien calla otorga". O denunciaba "los silencios de González" en el parlamento respecto al terrorismo de Estado.
"Cambiamos los tiempos y suscribo todas sus manifestaciones", indicó. "Yo exijo lo mismo". Zaplana lamentó que lo que pretende el PSOE, mientras "pacta con los radicales", es "excluir al PP", y puso el ejemplo del pacto del Tinell. Denunció su objetivo de romper una "tradición de acuerdo, que se instauró antes de la Constitución, entre los grandes partidos en cuestiones de Estado".
"Nosotros nos vamos a mantener en la línea que entendemos que es correcta, que es la responsable: controlar al Gobierno, seguir exigiendo información", dijo. "Si manifiestan su histeria es que no lo debemos de estar haciendo mal. Cuando se preocupan es que algo nos va bien", concluyó.
"No se nos puede estar llamando para pedir colaboración cuando están agobiados y mantener esta estrategia bastarda movida por la histeria y la sinrazón. Si el señor López Garrido no se desdice me imagino que no nos llamarán jamás para nada", enfatizó. "Al PP no lo amenaza nadie, no lo calla nadie y no lo amedrenta nadie". Esta es la casa de la palabra y no de la mordaza. En un Parlamento democrático no hay ningún tipo de limitación", proclamó Zaplana.