(Libertad Digital) Para Manuel Pizarro, "el Gobierno sabía lo que iba a pasar" gracias al índice sintético, "compuesto por varios indicadores que adelantan a seis meses o un año lo que va a suceder" y desde enero de 2007, "se venía anunciando un cambio de ciclo, es decir un momento crítico". Por eso, Pizarro acusa al Gobierno de haber ocultado "datos a la ciudadanía por razones políticas". En su momento dijeron que "España iba bien y" ahora dicen que "la cosa no va bien pero que vamos a salir pronto".
En su opinión la crisis económica que atraviesa nuestro país "se podía prever y se debía haber previsto". Sólo observando "un déficit de la balanza por cuenta corriente, la competitividad española por los suelos, con la peor tasa de competitividad de todos los países desarrollados, unos tipos de interés al 5,4 por ciento del Euríbor, el mercado inmobiliario por los suelos; las hipotecas subiendo y el equilibrio de las cuentas públicas en peligro" ya estaba "dicho" lo que iba a pasar. Por eso, para Pizarro, lo que ha hecho el Gobierno es no dejar que "una noticia le estropeara el titular".
Pese a que "para el Gobierno no hay crisis", Pizarro pronostica que "tal y como van las cosas, acabaremos el año rozando los 3 millones de parados". Unas declaraciones que ha hecho este lunes por la mañana en El Círculo a primera hora de Telemadrid.
Para el diputado popular y ex presidente de Endesa, España sufre tres "crisis superpuestas". En primer lugar, la crisis inmobiliaria "fruto de una bajada de los tipos de interés por debajo de la inflación". En segundo lugar, la crisis financiera, como parte de la anterior, "muchos hipotecados no van a poder pagar sus hipotecas porque las van a tener que pagar al 7 por ciento dado que el Euribor está al 5,4 por ciento, y la banca española, en crisis de liquidez, se está endeudando a un 0,8 o a un punto por encima del Euribor". Además, ha señalado que la banca española está intentando refinanciar 200.000 millones de euros.
En tercer lugar, Pizarro habla de la crisis del "modelo español, que no funciona". "España es un país con una inflación mucho más alta que el resto de sus competidores europeos y con una falta de competitividad que nos obliga a que paguemos un 10 por ciento más de lo que ingresamos. Y, para colmo, hemos tenido una economía de ladrillo y turismo barato. Es algo que hay que cambiar, pero no se hace en un año". En este sentido, ha recordado que "las crisis, como los incendios, se resuelven en invierno".
La subida del barril y el recibo de la luz
En cuanto a la subida del precio del barril de petróleo, Pizarro ha recordado que es una subida que afecta a todo el mundo. En este sentido, ha lamentado que "llevamos mucho tiempo echando las culpas a los demás". Por eso, ha dicho que "cuando las bolsas subían, era el Gobierno que lo hacía muy bien pero cuando bajan, son los especuladores que se llevan el dinero". Algo parecido sucede con el petróleo, dice Pizarro, "hay que recordar que con los biocombustibles se ha creado una inflación importantísima, porque, al subvencionarlos, hemos aumentado su precio".
En cuanto a la subida del recibo de la luz, prevista para el 1 de julio, Pizarro ha explicado que "cuando se subvenciona un producto que es un bien escaso estamos engañando y se premia la mala gestión", algo parecido a lo que sucede con el agua. Lo que hace falta, en su opinión es que "el recibo refleje el precio y que los ciudadanos sean responsables de lo que pasa ahí".
En este sentido, ha recordado que "muchos dicen nucleares no, pero hay que saber que el kilovatio nuclear cuesta entre tres y cuatro pesetas, el kilovatio del carbón, también tres o cuatro pesetas. El eólico cuesta 15 y el de gas natural 10". Por este motivo, para Pizarro lo ideal es "que elija la gente". Pero, además, el recibo de la luz incluye cosas que no deberían estar ahí, como la expropiación de centrales nucleares o la subvención de las eólicas. Todo esto hay que subvencionarlo pero no con el recibo de la luz sino con cargo a los presupuestos generales". En su opinión "hay un juego de subvenciones cruzadas en el recibo de la luz que lo hace más caro y menos transparente".
Huelga de transportistas
En el conflicto de los transportes, Pizarro diferencia entre lo que es el derecho a huelga y el abuso de ese derecho. En su opinión "hay que atender qué quieren, porque hay que escuchar a quienes se echan a la calle" pero lo que no se puede hacer es "coaccionar a con piquetes". El diputado popular, estima que es un problema que atañe a otros sectores, "el precio de los abonos y combustibles hacen que no sea rentable la agricultura". Un problema que "incide en la competitividad, pero como todo lo queremos hacer a base de subvenciones, seremos un país que no competirá".
En este sentido, Pizarro recuerda que se debe "respetar el derecho a huelga. El señor que se lanza a una huelga tiene un punto de desesperación y hay que ser respetuoso, pero tampoco se puede coaccionar al que no la hace, que nunca debe ser rehén de los huelguistas".
La crisis del PP
El diputado popular también se ha referido a la crisis que su partido desde que perdió las elecciones y Rajoy decidió dar un cambio de rumbo. Según ha comentado, "un recién llegado no puede opinar de los elementos del partido. Yo estaré con la persona que elijamos todos los militantes. E intentaremos acertar al elegir porque pretendemos que se mejoren los resultados en las próximas elecciones y que se ganen las europeas y las gallegas".
Para terminar, Manuel Pizarro ha asegurado que se siente muy bien con su actual situación dentro del partido. "Estoy muy contento como estoy y estoy haciendo mucha vida de partido y parlamentaria. No me pierdo ningún debate", asegura, "ya dije que hasta el 9 de marzo era el número dos, pero que después podría ser el 700.000 y ya dije también que no me iba a marchar. Tengo un compromiso con la gente de Madrid y así me lo he tomado".