Muy despistados andaban los conservadores británicos cuando Tony Blair ha lanzado la bomba educativa que tiene conmocionada a la opinión pública: el fin de las Comprehensive Schools. Dos días han tardado en reaccionar, y lo han hecho para recordar a la sociedad que ellos son los que tienen el derecho histórico a terminar con el sistema que los laboristas implantaron en Inglaterra hace ya 25 años.
Así lo ha afirmado Hague, líder del partido conservador y antiguo alumno de una Comprehensive School que, mientras tacha a Blair de fanfarrón, quiere ganar algo de tiempo para formalizar un proyecto educativo más conforme con la política conservadora y que suponga una “contraoferta” al sistema elaborado por la administración de Tony Blair.
Los expertos en planes de prevención de droga llaman “etapa rosa” a los años en que el adolescente da sus primeros pasos en el mundo de las drogas; en esos momentos se siente rebelde, mayor e importante, y nada ni nadie puede convencerle del peligroso camino de destrucción por el que se ha metido. Creo que vive también nuestro país una etapa rosa en el campo de la educación, todos los políticos se “congratulan del logro social indiscutible” que ha supuesto la LOGSE y unos por mala voluntad, otros por miedo y otros por pereza prefieren seguir el camino marcado por el precepto “igualitarista” impuesto por el PSOE en materia de educativa.
Cuando Esperanza Aguirre llegó al proceloso mundo de la educación, lo hizo con un gran sentido común, unas claras convicciones ideológicas y una admirable energía política. Se enfrentó al pernicioso plan educativo que había dejado el Partido socialista. El Partido Popular debe, ahora, saber aprovechar la brecha que Aguirre dejó abierta para evitar a la sociedad española una experiencia pedagógica que sólo puede traer mediocridad e ignorancia a nuestro país.
Si nuestra Ley de Educación es una mala y tardía copia de las Comprehensive Schools británicas deberíamos seguir de cerca lo que ocurre en el Reino Unido, si no para prevenir, al menos para adivinar lo que puede suceder en España.
Sorpresa en el partido conservador
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