La festiva destrucción de los políticos ( con treintenas de objeciones expuestas por un aprendid de filósofo un poquito cabrón y algo ocioso metido un ratito a política en los inicios del siglo XXI)
Vamos a ver. Quizá nos estemos volviendo locos. Cabe la posibilidad, y, no obstante, podría ser bienvenida. O quizá lleve yo más razón que un santo como, santos son ciertos “políticos” vanagloriados por el público de la plebe e incluso por intelectuales anónimos ( gente anónima ya con cierta culturilla, formación, etc ) y también públicos, como Punset, etc, de línea más seguidista, que no apoyan sino con el disfraz racional que recubre el instinto anterior y más básico “de la política” y precisamente ésta en su interpretación más mísera que es la interpretación burgués-actualista, individual e interesada, centrada en sus hechos contingentes, cotidianos como pura información advenida diariamente, es decir, completamente opuesta a la visión filosófica de análisis meta-fáctico que explorando la generalidad de los hechos permite ver y entender con claridad cierto esquema de la realidad analizada, es decir, gente más intelectual, anónima y pública, que apoyan con la interpretación cotidiana de la política: la de partidos, a estos “profesionales políticos”. Gente vulgar en suma, bien sea plebeya o tenga título de nobiliario de intelectual, pero no seres verdaderamente aristocratizados para servir sólo a la verdad y la progresiva potencia y cada vez mayor fuerza – con afán devorador- de espíritu y conquista expansiva de la realidad, el cual verdaderamente sólo puede ser para ser Máximo, y libre, solitario. Esto es verdad, ¿ quién diría lo contrario?. Nadie.
Pero en verdad son bellos seres de rostro, estos santos profesionales políticos, y tienen cualidades que hay que reconocer y de las que se aprende. Digamos que, aunque nos critiquen, después luego se les ama y se les recupera desde cierta "comunidad de esencia": en el fondo tienen valor y quieren ser también ellos mismos, pues si no, no nos reconocerían ciertas veces, es decir, a la oposición. En el fondo son valientes y hablan desde ellos, en el fondo son también aventureros y sinvergüenzas, fíjense en los cultivados análisis de J. María Aznar, contra todo pronóstico de cierta valía intelectual de un profesional de la política; tiene gusto por la literatura y la Cultura: es decir, en general son muchos de estos políticos profesionales, seres que necesitan la Historia y el Arte, seres cuyo valor máximo espontáneo, es, aunque no lo quieran, porque su naturaleza se lo manda, el conocimiento, la sabiduría. El hambre. Seres de naturaleza intelectual, buena o mala, a medio formar o ya formada, con mucha o poca, pero que específicamente no pueden ser sino intelectuales. Seres que quisieran ser todo y ser cada vez más altos en escala: seres de esfuerzo. Pero seres que pecan y cometen muchos fallos y tienen también graves deficiencias analíticas y multitud de “voluntades morales”, opuestas ética y políticamente; por ello, ellos se dedican propiamente a la política pero reconocen no obstante en el aspecto más vital de su sí mismo la moral y la verdad profunda “de lo auténtico” cuando es presentada ante sus narices y que en parte les pertenece pero que profesionalmente no pueden sino traicionar en su máxima pureza, pero que se olvida, sea justa, relativiza o engaña, y que por ello se intenta seguramente “dar un sentido conjunto” a todos los datos que leen, se saben, se piensan, relacionándolos arbitraria o metódicamente, pero haciendo auténticos encajes de bolillos realmente que por de tan tan verosímiles en su pretensión, se quedaron en mentiras creías como verdades ( aunque sin un dolor excesivo, pues no les compete a su naturaleza sufrir demasiado por lo que ellos mismos no son de una forma pura: filósofos) .
También está claro que tienen cierto gusto por la literatura, de corte hispánico preferentemente, aunque probablemente se "obligan para sí en sus adentros a hacer filosofía" no irse demasiado a lo literario, no desviarse, tener cuidado, “ser racional” en la medida de lo posible, aunque cueste y tenten las vísceras pasionales ( por eso uno se ha metido en política, para disimularlas o legitimarlas), porque en el fondo consideran a la filosofía en cierto modo superior sobre la literatura y por ello hablan de cierto rescate de lo literario en filosofía, ( fíjense en lo que dijo nuestro anterior presidente en Washington, en sus pedagógicos cursos y lecciones de Humanismo), es decir, por eso hablan con respeto ante la filosofía pero metiéndose ellos o haciéndose hueco a través de una pseudo vitalidad poético-española vital que sólo puede aspirar a lo verosímil; pero ellos se saben para sí mismos incapaces de realizarla de forma "pura" y por eso consideran en algún sentido lo que hacen como "una cierta filosofía", hablan con cierta relatividad y sin decisión semántica; amparando y ocultando psicológicamente la propia debilidad subjetiva de la incapacidad para una filosofía fuerte y de verdad, en el criterio epistemológico de verosimilitud como “actitud crítica” situada en la tradición actual y a la “altura de los tiempos”: engaños, engaños de creencias formadas hace mucho tiempo y que ocultan la propia superficialidad con que se han aprendido unos contenidos de los que ya uno ni se acuerda pero que se disimulan sin hablar mucho de ellos como “cultura” en la apariencia!; y así defienden un realismo que argumentativamente sería destruido muy fácilmente en un nivel filosófico “serio” y que sólo es defendido desde un interés no filosófico: lo que se cree nacional y español por ser "ello" o interpretado como lo propio de cepa hispánica, la tradición. Digo pues, que sus análisis políticos, de estos analistas como Aznar o Bocanegra, son en verdad superficiales pero la plebeyez comparativa les eleva y reconoce”, pero estando su verdad y objetividad en los asuntos tratados, distando mucho de la objetividad verdadera, de la generalidad y profundidad filosófica de un Ortega, por ejemplo, que si viniera de seguro lo criticaría plenamente. Porque cuando se habla de lo verdadero no se confunde con lo dogmático, sino con lo filosóficamente admitible y capaz de entrar en una categoría epistemológica: pues no llega ni a filosofía su verdad crítica, su “verosimilitud”!. No, no resiste los análisis de cualquier filósofo "seria y duramente formado" sobre el problema de la naturaleza de la esencia gnoseológica. Y este es el precio a pagar, en parte, por el mundo de lo público por el que han optado. Si los comparamos...con los grandes, en estos analistas, como ya he dicho: Jose María Aznar o Arenas Bocanegra, la Naturaleza ha comprimido las palabras para que puedan al menos decir lo más esencial, y puede verse su pequeñez como síntoma ya en el lenguaje mismo, y al momento, enseguida, en las ideas mismas extraídas sobre los hechos; en su categoría y nivel, en su valor y jerarquía. Sin embargo son canonizados como santos por la plebe: increíble!. Como síntomas de médicos analistas, veamos como su sintaxis es más simple, su escritura un continuo ensayo escolar-infantil que nunca mejora, es decir, digamos un par de verdades: son más vulgares sin remedio aunque tuvieran mucho tiempo para formarse, y segundo, son exagerados porque no pueden ser objetivos, es decir, concretamente son verosímiles porque no están suficientemente capacitados para la verdad ( por eso quizá proyectaban en nosotros, la oposición, de lo que a sí mismos en su fuero interno no resuelto se acusaban, y por eso a nosotros nos resultaba tan extraño y ajenas sus palabras ; no, no germina esa riqueza y esa flexibilidad de lenguaje y facilidad de léxico y de expresión como en Ortega y en los grandes: aún es tosca y arcaica, rígida o llana, facilona y simple. Campesino-realista con el maquillaje de lo académico. Tan prosaica…¡para niños de cuatro años!.
Todo eso es duro decirlo, aunque se hable de otros. A mi la primera vez que lo vi o lo detecté, me dolió y por eso nunca lo dije de estos políticos. Pero he visto que la política es decir todo sin compasión. Decir no un par, sino que diré yo, ¡una treintena de auténticas verdades!. No, nunca encontraremos esa flexibilidad natural espontánea en estos políticos aunque lean millones de libros o escriban centenares y centenares de páginas. No lo han demostrado hasta ahora y no nos van a sorprender al final de su vida. No, nunca serán como un Ortega, y en cierto modo, frente a él, son y han sido inferiores. Pero por eso el destino y la Naturaleza les reserva su olvido, esa será la respuesta de lo -divino- cuando ellos ya hayan pasado por esta Tierra, cuando ella ya les haya dejado la oportunidad de todo su hacer aquí y hayan agotado todos sus movimientos, cuando descansen sus restos sobre su tumba en paz; ella les reserva algo, la Naturaleza: su respuesta, el comentario de texto a su Vida, y éste es en su esencia: el archivaje y olvido; La desaparición. Y esa es la verdadera naturaleza del halago actual de sus salutatores: la gloria efímera que disimula el verdadero destino que la Naturaleza tiene reservado para ellos: la nada. Y esto no es una mínima porción de resentimiento, ni tan siquiera una mentira y un engaño, sino una tranquila verdad comprobable, un puñetero hecho que ocurrirá porque “así es debido”, tal lo que se es y lo que se ha sido.
Ese es en parte el maléfico gesto, pero justo, que la Naturaleza tiene guardado secretamente como reacción a las acciones que en vida hicieron estos hombres que tampoco pudieron ser ni dieron para más. Estos políticos, que dice José Blanco, de pacotilla. O intelectuales, para el caso ( cuando se meten a ello en congresos en Washington, por ejemplo). No, no porque fueran malévolas ni inmorales sus palabras, sus artículos y libros no serán recordados, sino porque sólo las verdades, las grandes verdades, ( las cuales proceden de espíritus cuya genética paterno-filial está más desarrollada, más perfeccionada en sus etapas anteriores por su propio árbol familiar: recordemos la verdad de Ecce homo que para la generación de un gran espíritu son necesarias muchas gotas de siglos, hasta que al fin la Naturaleza da su obra máxima, como fruto del perfeccionamiento y pulimento-refinación de sus instintos) sólo los grandes valores demostrados, sólo lo que está capacitado para lo Universal para el hombre, bien como elevada ciencia y altos principios, o bien universales negativos como tragedias y desastres con ellos ocurridos, sólo como lo aprendido por mérito universal o positivo o el universal negativo que conviene aprender para no repetirlo, sólo lo que de verdad tiene Valor, es decir, sólo esto, merece auténticamente, queda en la Historia "eterna" del ser del Hombre a lo largo de ella como parte de su legado evolutivo, Cultural, y es aprovechable para otras generaciones futuras. Porque no han sido suficientemente rentables para otras especies, para la Naturaleza, ella les dejará olvidados a estos pequeños escritores, porque su cerebro no era muy potente, porque no eran, la verdad, muy inteligentes, pero no obstante hicieron lo que pudieron, la Naturaleza tampoco les augura una estela muy longeva y perdurable en el tiempo "eterno" donde brillan las verdaderas estrellas; su destino es abarcable con la vista con la simple mirada, y su cola de cometa fugaz y pasajero en la existencia sólo es un poquito más larga, pero aún así de pequeño tamaño ( una vergüencilla si la comparamos con la enorme cola de Goethe, por ejemplo), que la de los hombres diarios de la plebe que nada, nada absolutamente saben y vagan cotidianos como sombras ocultos a la Vida y al verdadero Ser de las cosas. Para estos la Naturaleza ha reservado su destino: la reproductibilidad y el trabajo: hijos y productos materiales serán sus verdaderos frutos tras el fin de sus días.
La verdad es dura!. Realmente son auténticas verdades trágicas que nunca debieran decirse de alguien cuando realmente son Verdad porque pueden hacer daño. Pero la política me ha enseñado esto y aunque se me halla atacado débilmente, sin capacidad para decir lo que realmente es Verdad, esto lo es sólo por la debilidad subjetiva del atacante, pero éste merece su justa y adecuada respuesta.
Digamos que para los grandes, para las verdaderas estrellas de la filosofía, y para las que están aún explotando con fuerzas creadoras en su núcleo para llegar a ser un día una Supernova, o una humilde estrella solitaria y desconocida), una Obra, como dice Schopenhauer, es su verdadero objeto y su destino. Su eterno hijo que será regalado a la Humanidad por siglos y será conservado por la Naturaleza-Historia. Y lo más penoso es que ni la persona "minor", la enana azul, nunca mejor dicho, pueda vivir la tragedia referida, es decir, seamos realistas: puede que ni lo viva lo que decimos, que llanamente le importe un pito; que ni lo llegue a pensar verdaderamente y lo capte y lo sienta en sus entrañas con metafísico dolor, pues eso queda más, mucho más allá de ellos probablemente: pues no están capacitados para la filosofía y la sabiduría, lo metafísico en suma, para el pensamiento puro; no están en un nivel superior de existencia y el mismo no captar sus límites constituye la felicidad de su ser, pues de sólo verlos, no podrían ser: pues ser es querer ser más, como nos enseñó Nietzsche. Pero un ser cuyo más posible no es muy amplio, y lo viera, ¿qué podría hacer sino suicidarse?. Es decir, es mejor que no vean sus límites, púes su ceguera es lo que constituye la conservación en su ser y su creencia es lo que mantiene viva la producción de su ser con sus escritillos, palabrejas, exageraciones y vanidades, en suma, como ya han demostrado y sin excusa; pues objetivamente no están capacitados para la verdad auténtica: lo demuestra principalmente que habiendo cumplido el período de su formación “nuclear”, es decir, el hecho de que no ya les excusa el "tener que formarse aún", (y decir que son una séptima parte de lo que pretenden ser, por ejemplo.), no hayan conseguido grandes cosas intelectualmente, como casi cualquier analistilla político como Felipe González, etc. Lo externo-público impide una formación auténtica.
Los intelectuales menores, es decir, ni siquiera los secundarios, ni los terciarios, sino los profesorcillos o famosillos de hoy, como por ejemplo: Punset, el mismo Arsuaga, o el analista Aznar con sus libros de política metido ahora a pedagogo, es decir, todos estos divulgadores la ciencia, la filosofía, etc, que al menos la dan a conocer al inexperto y hacen representar en él la imagen ficticia de la sabiduría, todos ellos "ídolos de la caverna", ineptos, en suma, que serán olvidados por la Historia-Naturaleza, es decir, por el misterio radical del Universo que la biología ni la metafísica misma conocen, pues ésta lo busca, de todos estos nadie leerá sus articulillos ni quedará nada en el futuro. Pobres!. Y digámoslo con compasión sub specie aeternitatis y con cariño por verles finitos y limitados, englobando su ser con nuestra visión totalizadora-objetiva por encima y superior sobre su vida: Pobre y finito es su ser, pequeña es su categoría ontológica por mucho que engañen a los inexpertos filosóficos en la apariencia!.
Pero una cosa queda aprendida de ellos: "la política o la crítica sin ningún tipo de piedad ni miramiento". Pasión sin compasión ( mucha "razón" en el caso ejemplificador fuente de aprendizaje tampoco se ha visto, pero porque ni podían. Pero como uno puede, emplea sus armas y practica lo que ellos mismos hubieran practicado de poder hacerlo. Eso ya lo decía Pericles contra los ciudadanos de Melo).
Ha de decirse, lo que cada cual, bajo consideración propia, merece. Seamos realistas. Por este motivo será necesario decir no un par, sino una treintena de verdades. Las más generales y esenciales arriba han sido esbozadas, otras, importan un higo y otras podrían especificarse y argumentarse muy precisamente, como otras veces se ha hecho, pero no hay tiempo ni ganas de hacerlo.
Pero no obstante estos santos políticos no recordados por la Historia,
tienen algo que me gusta, y no es sólo su bello rostro contemplativamente mirado a la griega, dígase sin homosexualismo de por medio, tampoco su limpieza e impecabilidad de imagen, no es sólo ese aspecto técnico neoconservador bajo una risa que le da ligereza e infunde cierta amistad en el interlocutor, que se abre a la posibilidad de lo jovial con él; no, tampoco es esa controlada escritura que sabe "lo que no decir" en el momento preciso para no ser catalogado "fácilmente" y mantener consistente la crítica que hace a su adversario; sí, pues guarda la frescura de un liberalismo ilustrado, incluso se ha apropiado lo trasgresor de la escritura; en cierto modo conoce a su "enemigo" teniendo parte de él ya en sí mismo: esta es su vacuna, y en cierto modo, lo que le salva y le presta inmunidad y amistad adversaria: "ser una naturaleza impura", pues una naturaleza pura de cualquier tipo, le falta la verdad y los matices de su opuesto: También ha aprendido de su atmósfera y su estilo, sabe cómo apropiarse lo ajeno, hasta opuesto a sí, y hacerlo suyo. ¡ Es un virus que aprende y tiene capacidad de resistencia!. ¡Es un espíritu que sabe hacer necesario lo contingente!. Pero no llega a ser un Sida inteligente como su oponente, que nada más nacer, ya es prácticamente mortal para con quien ataca. Pues sabe sus puntos débiles y los explota, hasta matar a la especie, al organismo adversario. La política es pura biología!.
Sabe ser moderno y tener una ideología conservadora sin explícitamente ser delatado y juzgado bajo moldes ofensivos prefabricados para "tales casos". En el caso de su defensa o como arma de ataque, su Naturaleza ha fabricado el arsenal conceptual, que su profesión-vocación misma necesita: por ejemplo: concepto de " fanatismo ideologizador", para "izquierdistas de opinión plana y unilateral", cuyo "fanatismo" (concepto-exageración) en el fondo no procede más que de su Incultura; y a este arsenal conceptual inventado suma cierto voluntarismo y tensión-viveza de expresión a lo que llama "realismo" pero muchas veces es pura metáfora, entremezclada con víscera, irresponsabilidad juvenil, superficialidad de análisis, exageración previsible desde la línea a priórica y cotidianamente interpretadora de la política: es decir, partidista y no filosófica ( pero porque no está capacitado para ésta, para el análisis auténtico que merece el nombre de Filosofía, con mayúscula), pero que no obstante muchas veces suple lo que a algunos conceptos y debilidad de razonamientos, tan “adjetivamente interpretados" les falta: sustantivos-realidad, es decir, sustancia-verdad permanente universalizable. ¡ Pero hay espíritus que jamás lograrán sobrepasar la pequeñaja habitación de la Doxa – que constituye su propia profesión y de lo que viven: vivir de la apariencia, del engaño, es decir: sofistas en el sentido más negativo, es decir, platónico de la palabra.
Decía al principio que sólo almas "privilegiadas intelectual y moralmente de la chusma" han conseguido ver el aura de ciertos "santos" políticos, ( como Rajoy o Arenas, etc) en un chispacito de luz-imagen impresionados por la santidad y valor de unas palabras insólitas a sus oídos de... plebe. Porque...
¿ Me intentarán hacer creer ellos en la existencia de resucitadores morales e intelectuales en la España de nuestro tiempo?. Puede llegar a seducirme, pero de momento creo más en la atmósfera intelectual de los enterradores o en su caso, en el espejismo de los actuales sofistas ( aunque también halla que reconocer en ellos ciertos valores y se puedan aprender cosas valiosas de estas figuras).
¡Los nuevos santos del siglo XXI están a nuestros ojos y no los vemos!, dicen los salutatores de la Doxa. Pero la verdad, la amarga verdad, la eterna y diaria herida de nuestra historia es que, desgraciadamente, sólo los campesinos ven milagros.
Cae la lluvia sobre mí cuando digo estas palabras y me retan a dar argumentos delante de todo el mundo: "ea!, capullo, vamos, remángate si tienes lo que hay que tener, vamos, a ver si te atreves delante de toda esta gente; dame, dame un argumento y deja de abusar de la palabrería!. Pero qué le voy a hacer... si merezco el título de inepto. O simplemente, me importa una higa la "III República", como tantas otras cosas que no hay ni tiempo ni ganas de exponer ni precisar sistemáticamente, y hago lo que hago con ironía pragmática partiendo de cierto margen de reserva y desconfianza. Hay muchas formas de hacer y presentarse, de atacar y defenderse, y una de ellas: desde este teatro con máscara. Hay que aprovechar sus posibilidades: así que "ago pitorreo" esta vez, que es otra forma de crítica. ¿ Qué "ser invisible" no se divertiría un poco jugando con los hombres?. ¿ Qué dios griego no se divierte con los mortales?. ¿Y qué es un foro sino un vivir fuera de este mundo y contemplar como espectador el drama?. Lo absurdo es tomarse el yo demasiado en serio, lo cómico y estúpido es no experimentar con máscara!. Perdón, pues, por mi estulticia malvada!. Todo genio se divierte y juega cuando tiene la oportunidad y puede. A esto lo llamo: experimentalismo.
( Ya he creado una especie de Telenovela dentro del foro, con toda una intriga, un argumento, unos asesinatos, historia, sexo, pasiones, con la esencia viva de lo humano, en una disputa viva y con unos personajes. Ya hay teatro!. Quizá algún día se haga un libro o sea mi regalo para que otros "minores" pasen, de algún modo, a la Historia como recompensa a cierto "divertimento" que me proporcionaron y que yo mismo me brindé con mis propios pensamientos que por horas hicieron olvidarme de mi más terreno dónde y de mi más cercano ahora.)
Sigo.
El cristianismo y la esencia de todas las religiones, buena parte de filosofías en los 26 siglos de su Historia hasta nuestro presente, incluyendo a Heidegger, y muchas otras cosas que yo, personalmente, inculto aún en el presente día, y por tanto, sin todas las herramientas que potencialmente pretendo, arquitecto de maravillas sin ni siquiera lápiz,
(- todavía me queda hasta el 2065 para mi muerte-, si es que me muero, es decir, 56 años más de formación. Si me crionizo entonces igual duro un pelín más-Yo ya lo recordé, pero no se me hace ni puñetero caso. El dinero sobra, pero en el fondo no se quiere seguir en el mundo descubriendo la maravilla del futuro: cobardes!) -De momento soy un efebo hermoso, lo digo por si interesa ”intelectualmente”, pues aún se pueden revivir tiempos "griegos"….en compañía de maestros. ( Aunque uno ya tiene cierta experiencia).
no tengo ni puñetera idea, dijeron: porque estamos ciegos y no lo vemos, "esto", la realidad, es mentira!. Quien sabe, quizá halla santos entre nosotros, o filósofos y yo me equivoque. O quizá sean ambos unos farsantes de su título, como entre ellos mismos, cual vana disputa, muy humana, - mirando desde lo Absoluto sub specie aeteritatis- se llaman unos a otros y se reconocen: imbécil, inculto, malvado, incapacitado filosóficamente, no pasarás a la Historia! etc etc etc.
Ayy.... cómo luchaban los hombres en el bello Arte de la política, en esa continuación de la guerra por otros medios que decía con verdad Chauteaubriand.
Pero hay que tener la dureza suficiente y aspereza de alma para llegar a amar la Guerra. Sólo una vez insultado, escarniado, o desangrado si llegara el caso, hay que verse separado de sí y ver entonces, con gusto, el hecho como Arte desde la idea metafísica y quererlo volver a repetir: es decir, darnos cuenta y Saber Ver desde fuera, que cuando por ejemplo, nos estaban insultando, o humillando con Verdades,
(sea justamente o no, contradictoria o débilmente, o como quiera que sea, y antes de las 101 refutaciones posibles-, ver antes de esto y del posible contrataque que será tomado represor y solamente represor por la víctima porque no puede ella, más débil, constituir un contrarazonamiento igual de sólido, o preciso que con el que se le ha atacado, y por ello, desde el victimismo, recomendará leer, por ejemplo a Montesquieu amparándose en una "desobediencia civil" que no es más que el efecto subjetivo de una debilidad propia ante el contrario y que se manifiesta protegida con el escudo "legítimo" de lo políticamente correcto cuando ha de defenderse de algún modo, con algún recurso, por medio de, por ejemplo "la posibilidad de democracia misma syss hay posibilidad de desobediencia civil".
Pero no se es represor con nadie, simplemente se pensaba como uno mismo piensa "seriamente" y se admitía una respuesta del adversario a lo dicho, otra cosa que ésta fuera cierta. No es represor demostrar que algo no es cierto!. No es una cuestión de desobediencia civil o no!. Ésta, como he dicho, no es más que el recurso defensivo de cierta debilidad subjetiva contraria que no le queda otro remedio que amprarse en lo que suena políticamente correcto: la D. Civil, que posibilita la mismísima democracia, como escudo "victimista" para repeler el ataque.
Y entonces, el político, solidarizado con otras víctimas futuras del gran Hombre fuerte, defenderá a éstas incluso cuando "el lobo atacante" que las ha mordido lo haya hecho "puramente para divertirse, y desde cierta sospecha fundada, con sentidos y formas muy distintas con las que a el político mismo se le atacó" )-
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saber ver entonces separadamente contemplando la escena pasada ya sida, y entonces, ver que en ese puro hecho que ahora vemos como Idea, nosotros mismos, nuestros huesos, nuestra carne, estaba de algún modo en cierta "universalidad". ( Porque la idea piensa lo que había allí pero no se veía en la pura acción vital).
Si ahora fuéramos a la guerra, física por ejemplo, ( para lo intelectual es lo mismo) padeceríamos su drama, su penuria, su dolor, su sangre en nuestro propio cuerpo, pero en este momento vivo, en el momento mismo de la Acción, seguramente no seríamos capaces de ver que "estamos haciendo algo humano y hasta bello" como tal, con un Valor intelectual extraído de la pura Idea del hecho intelectualizado ( y esto no es el típico justificacionismo); que este hacer mismo no sólo lo estamos haciendo nosotros ahora sino que......fue realizado por muchos otros hombres en el pasado y también otros muchos lo padecieron. Entonces bajo este sentido uno mismo y el hecho que se practica toma el carácter mismo de "sagrado", de elevada categoría axiológica e intelectual ( los hechos recordados como Historia nos hacen ver ciertos valores objetivos, cierta belleza y cierta objetividad de caracteres que no eran vistos en su tiempo presente), que incluso las especies más básicas de los seres vivos hacen "la guerra", que los animales de inferior orden, y las bacterias y las larvas y las bacterias "luchan", y que este hacer mismo que nosotros ahora hacemos, forma parte de un misterio de la Naturaleza que nosotros no sabemos pero formamos parte de él al hacerlo mismo. ¿ Por qué luchan en su fondo ultimísimo más allá de la conservación o el instinto de poder de sus voluntades?.
Nosotros formamos parte de un misterio del que no nos damos cuenta. Cuando hacemos la guerra, cuando matamos a alguien en ella, por ejemplo, no vemos tres cosas fundamentales:
1) Lo universal de nuestra acción en la que nosotros a semejanza de otros hombres históricos estamos incluidos. ( Esto ya hace sentir cierta honorabilidad en la acción: dígase la guerra o cualquier otra acción, hasta beber una taza de café).
2) No vemos tampoco la propia Idea y los caracteres intelectuales de nuestro hacer mismo que objetivamente están en el objeto actual con el que tratamos pero no podemos verlo en el presente mismo y sólo en su historicidad nos serán revelados sus caracteres objetivos que hoy no se nos muestran (porque se contemplan más fácilmente después de acaecido el hecho, y para lo cual también ayuda relacionarlo con alguna Idea cultural: histórica por ej café actual__ café decimonónico para ver intelectualmente nuestros cafés actuales, ya sí descubrir lo que corresponda a su esencia)
3) No vemos el problema filosófico radical, el misterio metafísico de ese hecho en concreto: Luchamos aquella guerra formando parte de un misterio sin saberlo. ¿ Por qué narices luchan las especies más allá del darwinismo o de la voluntad de poder?.
Como decía antes: "Quien sabe, quizá halla santos entre nosotros, o filósofos y yo me equivoque. O quizá sean ambos unos farsantes de su título, como entre ellos mismos, cual vana disputa, muy humana, - mirando desde lo Absoluto sub specie aeteritatis- se llaman unos a otros y se reconocen".
O quizá coincidan todos en uno en ser santos farsantes y eso constituya su parte más original de su ser filósofo. ¿ Quién es quién?. Esta es mi pregunta. La cual no tiene en este momento ni una pizca de duda. Y es que, todo lo sé, dice el sofista dogmático, a pesar de que no he llegado a los 26 ( fecha en que se descubre "la Verdad", por si acaso no lo saben, o no la descubrieron- como dice Ortega en no sé qué parte y de qué modo de sus Obras completas - cuyos diez tomos completos ya es hora de que se vayan leyendo- , y si no miren a Schopenhauer) y voy a demostrarlo.
No sólo lo que acabo de decir, que son muchas cosas, sino que voy a proponer una hipótesis constructivista sobre el artículo de Agapito que ponga en relación vida y política. Intimidad y máscara. Profesión y putas, que es... de lo único de lo que sé hablar yo. Y que es en suma, a lo que se reduce mi vida privada. En el fondo, la vida de cualquier español..
¿ Que estoy obsesionado con ellas?. Pues si, un poco, la verdad. Habrá que mirárselo. Tiene la naturaleza de un tic nervioso de escritura, que, como sólo lo pongo yo, sólo lo he creado yo y tengo su patente, quiero promocionarlo. ¿ Por qué el filósofo no acostumbra a salir mucho de sus verdades descubiertas?. Porque no son de otro.)
Recapitulando:
¡Sería arbitrario decir que no hay nexos entre el profesional político y el escritor que narra su vida, y más precisamente cuando aquél coincide con este último. (Risas)
¿ Qué profesor o qué decano o qué catedrático, o incluso, qué escritor, diría hoy en un artículo hablando de política, o en una conferencia o entrevista pública que se va de putas", aunque no se fuera, cuando hoy "no está permitido" psicológicamente en lo público?. Qué escritor se vanagloriaría públicamente hoy, aún, aunque no lo crea, pero jovialmente libre y juguetón, en topiquillos históricos como nuestro san Francisco o el Bendito Duce y diría y pondría el cara al sol en la habitación de su casa, aun estando chubascoso y siendo un comunistilla asqueroso como yo, para escucharlo a todo volumen desde el tendedero?. A este humorismo lo llamo sanidad intelectual.
¿ Quién hablaría del victimismo de los teóricos de Frankfurt?, Quién habría inventado y hecho una filosofía del culo, una filosofía sexy o incluso vasca, una antropología de las bragas, cuando era materia sólo hasta ahora y paradójicamente reservada para las furiosas ménades feministas?. Pero la cuestión es: hoy, aún, queda algo que nos "sea imposible pensar"?.
Sí, precisamente el presente. El minuto.
Porque ni siquiera hemos aprendido de la consigna del maldito ( que no el Maligno, porque no era socialista, parece): "ver lo eterno en el presente". Es decir, todo lo que no es Idea, porque todavía, por lo tanto, no es Cultura-, nos es imposible pensar hoy, es decir, nos es realmente difícil admitir y querer con gusto, en el minuto mismo del "ahora". ( Porque la Idea siempre viene "después", es por ello que lo incluso "asqueroso" y sucio se hace bello con el tiempo y sólo es tal en el presente cotidiano de la "ocultación" de la Idea: ( fíjense por ejemplo lo interesante de una mierda triásica de pterosauro, por ejemplo, o contemplen sus propios excrementos con calma, hoy, con conciencia futurista, es decir, viéndola con misterio cretácico, por ejemplo: miren miren asombradamente sus grumos, sus cavidades, sus estratos, y piensen en la "belleza humana" de su deposición desde una visión espectadora no humana, de siglos, para que así puedan contemplar de forma puramente intelectual sus caracteres objetivos, para que descubran auténticamente la verdad de sus rasgos) porque brota su esencia no vista, sus caracteres, se finitiza, se pone como hecho intelectual puro, porque se vuelve Idea y se descubre en esa realidad algo no visto por los presentes de su tiempo vivido: su Valor, su Belleza, y su Logos; porque cambia su propia naturaleza, se desinmediatiza, su objetividad misma se transforma, se desvela, y brota entonces la esencia - desde la no afectación subjetiva de la voluntad, desde el sujeto avolitivo que contempla el hecho ya despresentizado. Recuerden la lechuza de Minerva ( esa representación zoomórfica del auténtico filósofo, de ojos atentos y contemplativos): otro día explicaré, si no he explicado ya pero no se han dado cuenta, o no comprendieron, pobres, las profundas razones de esto)
Cuántas grandes cosas leídas y despreciadas hoy, y hasta repudiadas con insultos, pero que miradas con la gloria de la Idea, intelectualmente , permite ver los caracteres objetivos que allí había y que ni el mismo autor, por cierto misterio de la Naturaleza, era incapaz de ver en su tiempo presente. Quién, pues de estos personajes
(-tírese para atrás de esta frase bárbara, - quizá mi pensamiento sea tan largo y tan germano y por ello estructuralmente superior, dicho sea de paso, - hablando en términos racista-experimentales-darwinianos con un prurito idealista-neoromántico, y cierto toque...herdebergiense ( cata de vinos filosófica) adaptados a un caso español como yo, de este siglo,
( otro día la demostraré e intentaré precisar mis vínculos sangüíneos con "esta raza", cuando también tenga la prueba de mi certificado genético del servicio de la página Igenea, son 250 euros; como también con lo arábigo: se ve en mi rostro...y en la nariz. Muchas veces he sentido en mí algo de Ibn Arabi, tan joven y tan sabio....
Leer es peligroso, en parte: anula el pensamiento original y propio. A veces ocurre: he leído tanto que me he quedado sin palabras.)
¿quién diría, pues, las cosas que yo, don Psoe_fan, antiguo Eróstrato, sofista par excellence, aprendid de filósofo, en nuestro famoseo intelectual? Nadie!. Tanto gato al agua al que van Trevijano y otros analistas, y tanta independencia de criterio. Bueno, bueno, todo eso relativamente y según con qué y quién se compare!.
Quién pues, de estos personajes, se atrevería a decir algo realmente trasgresor ( váyase no a otras esferas de profesiones liberales). Y es que aquí está el problema. ¿ Queda algo "trasgresor" por decir en este tiempo y que no tome la forma pop y "artificiosamente superficial" de lo posmoderno?. Esta palabra, trasgresor, me suena desvirtuada por victimista para hoy, pues realmente en nuestra sociedad democrática avanzada - créanse este bodrio los liberales reformistas neocon- no se puede ni tiene el sentido auténtico y de Valor que tuvo la palabra subversión. No, hoy los radicales sólo merecen el título de masas con sus migajas de historia mal sabida. No soy un subversivo, y mas desde estas sombras. Como mucho aspiro a humorista. Es más, creo que ya lo soy. Filósofo y humorista, dicen los subtítulos de ciertas entrevistas.
Esto ya lo decía, pensaba, teorizaba, este problema sobre el estilo, lo que queda por decir aún, etc, en otro artículo sobre el arte y el arterismo, y en un escrito autocrítico de mí mismo, como éste de Agapito, que no se si lo saben o son capaces de verlo pero es completamente autocrítico con su Sí.
Pero quizá mis comentaristas plebeyos no lo comprendieron y por eso no pusieron nada. Sólo dijeron: qué diarrea mental, qué zurullo, o...¡sea más claro si quiere liderar esto!, sea riguroso y claro como le compete a una auténtica autoridad del Estado y no a una ministrita!. Mas luego me acusaron argumentativamente de...ser un imbécil intelectual y moralmente. Qué se le va a hacer. Me importa una higa.
Pero seamos autocríticos como Agapito y digamos la verdad nuestra:
Yo puedo ir muy de trasgresor aquí, a escondidillas, pero en la realidad soy un puñetero cobarde, todo hay que decirlo. "Hombre prudente discreto y miedoso". Pero eso no, eso no invalida mi pensamiento, mi pregunta: ¿ cuál era? Ni me acuerdo. Inepto, inepto, inepto!.
Dicen algunos analistas que es necesario escribir escribir escribir sobre todas las cosas que se saben, que se leen o que se relacionan arbitraria o metódicamente. Y aunque hagan encaje de bolillos, muchas veces, como una costurera, y los pobres escritores ciudadanos les den materia pura de la sierra de su espíritu, gratuitamente, facilitando con ello parte de su trabajo, y formándoles intelectual y moralmente, algunas veces les salen bien los hilos trenzados y sale una mantita con la que proteger del frío a todos sus servidores. Si algunos analistas fueran señores feudales, sus siervos no estarían muy a disgusto con ellos, pues en parte les cuidan y les reclaman cuando faltan. ¿ Por qué?. Pues porque en el fondo les divierten sus "subordinados políticos", como a sus campesinos ellos, y tienen por igual, cierto espíritu curioso y necesitado. A veces hasta el siervo tiene compasión de su señor y le ve vulnerable, entonces se amista con él y desea protegerle. "Aunque sea tan visceral y lo que diga no se sostenga mínimamente con una racionalidad objetiva y precisa" ( ejemplo claro y paradigma de solidez objetiva intelectual y análisis filosófico profundo y general: Ortega) en el fondo tiene, él, como figura, su Valor y su posible rescate.
En el fondo son pobres ingenuos aventureros sabedores de que su lucha, su instinto y su afán es, en cierto modo un juego", y por ello sus palabras no son sólidas y definitivas, sino que guardan un halo de gratuidad, de cierta broma-ataque que brota desde las vísceras del desprecio pero con un doble-detrás de juvenil irresponsabilidad en su fuente de salida, pues ellos...lanzan frescos e irresponsables, cual alumno que sin haberse estudiado bien el examen probase el intento de aprobar con medias verdades-resonancias puestas con picardía. Ellos lanzan, "arriesgan una realidad" y que Dios diga hasta dónde puede llegar ella!. Pero tiene el peligro de toparse con un profesor serio y experto, ( por mucho cachondeo que en otro nivel tenga), es decir, con un muro a un metro del camino de esta feliz "balita ingenua" y que se rompa en mil pedazos cual gatito castrado. Pobres!, habremos roto su juvenil irresponsabilidad que era el doble-oculto de su desprecio visceral realista-hispánico. Pobres, pobres, pobres!. Pero no se puede tener compasión en política ni ética alguna. Sigamos hablando sin pizca de resentimiento y con la verdad por delante auténtica, con la veradd deconstructiva de un texto vital, de una vida para descomponerla: deshagan mis argumentos sobre Sí mismos para salvarse!.
Y en verdad, en verdad me he dado cuenta de que sus propias ideas entran en conflicto ellas mismas y se debilitan como si fuesen un extraño organismo o una suerte de bacterias que en ausencia de conflicto necesitasen destruirse a ellas mismas. Hasta me he llegado a plantear que sólo brote el optimismo en ellos cuando “se sienten con ventaja” porque de natural se ven por debajo o nunca han podido pertener al grupo de los fuertes, de los que ganan, de los que vencen. Por eso son tan pesimistas!, como defensa subjetiva de su yo débil y auto-excusa frente a la realidad dominante!. Desahagan, deshagan los argumentos sobre sí mismos delante de todo el mundo si son capaces!.
Así son sus ideas: finitas, duraderas, débiles como su inteligencia ( la cual se desvela en cierto modo en su sintaxis, en la capacidad siempre “interpretadora, excesiva y poco adecuada a la realidad objetiva, “verosimililla” a lo sumo, y sin la excusa de la no completa formación previa al presente día), ideas que se autodestruyen si no se las ataca!. Débiles, espermas sin consistencia natural y fuerte para fecundar, es decir, para tener Verdad. La ausencia de verdad no es fruto de la realidad, sino el efecto de una debilidad subjetiva. ¡ Cuántas cosas la Naturaleza nos esconde para hacernos felices, y así se inventó ella, su naturaleza, una excusa “epistemológica”, (cuyo título mismo le queda grande)!. Por eso es por lo que digo que de la política a la biología, de la biología a la metafísica, e incluso de la metafísica racional y filosófica al esoterismo ( con un salto ontológico de plano sólo comprobable empíricamente, por ejemplo, a través de "casualidades" : números, hechos, acontecimientos "azarosos", o ciertas correspondencias verdades reiteradas gran número de veces de aciertos mensajes tarot, etc), no hay tanta distancia.
Vuelvo a mi inquisición previa: ¿ Quién es quién en el artículo? He ahí mi pregunta. Y he aquí mi respuesta interpretativa: El que se cuestiona es el propio profesional de la política, Rajoy, el criticado ayer, Gallardón, es el escritor de la política “redimido” por la “justa razón” que gobierna también a Rajoy y más allá de él y que reivindica ( ante la ausencia de Gallardón, y por lo tanto de objeción) “como fuerza de la justicia natural”, la verdad de lo criticado pero no reconocido en la crítica que se hizo ( sin que esté por ello en Argentina, como De la Vega), pero la naturaleza de Gallardón es común, pues éste sólo es el símbolo de una naturaleza subterránea única que está presente en el presidente de la comisión: en Arenas Bocanegras también encontramos la naturaleza de Gallardón. Pues esta naturaleza no es más que la contrafigura del poder político dominante. El PP se autocritica y reconoce su poder compartido. Entonces se alza la respuesta napoleónica, estratégica, refugiado hasta ahora en la isla de Santa Elena del silencio y que esperaba el reconocimiento de su propia “justa verdad” por el enemigo, y que ahora, una vez debilitado éste por su autocrítica, inicia el ataque ofensivo despiadado y empieza con ello, el bombardeo festivo de la política!. Toda una Obra de Arte, todo un libro y una conspiración de trama literario-filosófica. ¿ Quién lo ha hecho?. No lo sé, pero se ha hecho en una pequeñaja habitación oscura de comentarios, en ellos la Naturaleza de alta categoría ha creado “Humanidad elevada” de forma espontánea: ética, pensamiento, cultura, valores, originalidad, análisis, voluntades, sentimientos, locuras, excentricidades. Sólo sé que se accedió por una puerta pequeña y cotidiana donde lo más seguro era lo previsible y sobrevino la indeterminación cósmica de las fuerzas divinas de la naturaleza encarnadas en un espíritu “metido un ratito a la política”. Sólo sé que cuando se abría esa pequeña puerta se veía una luz amarilla, se sentía su ambiente cálido y se escuchaban los gritos taberneros de borrachos que bebían el vino de la Vida y luchaban con la sangre que éste representa ofreciéndola y luchando contra sus invitados. En suma, una "amistosa" taberna de Política se encontró al abrir la puerta. Una fiesta, y un peligro. Eso fue todo. La ficción de un sueño bajo una cálida luz amarilla y los gritos lejanos de borrachos que ha un tiempo hablaron y cantaron para reírse de lo trágico dsede su propia Conciencia de lo Negro. Ahí estaban los muertos, y por tanto, las sombras bailarinas cadavéricas de los filósofos recordando la propedéutica de la muerte con su hablar desde las sombras, con su hacer desde las máscaras, con esa divina dialéctica nueva de jugar a ser actor y espectador al mismo tiempo y vivir la Acción como una Idea!.
Lo de Gallardón demuestra claramente la falta de autoridad de "mariconplejos".
Al actual PP. se le podría llamar "un extraño pide mi voto"., que evidentemente será para UPyD., mientras esten estos cuatreros al mando,.
Las actuaciones de Rajoy en los asuntos de Valenca y Madrid así como sus afirmaciones de potestades que. según los estatutos del PP, no tiene, le confirman como una persona con una mentalidad más próxima a un cacique de pueblo que a la del estadista que presume, infundadamente ,de ser.
Siento tener que decir que la Unidad de España está irremesiblemente rota. Ya los partidos están rotos y nadie reconoce mas autoridad que la del inmediato superior que le facilita "la mamandurria". Las Autonomías han sido el vehículo para romper España de la mano de la estulticia de la mayoría de los españoles. Aquí no ha habido conspiración "judeo-masónica". Aqui ha habido limpia y llanamente "estupidez", falta de patriotismo y...una banda de corruptos aprovechandose del caos. ¡Nos lo merecemos...y pagaremos por ello! ¿Estoy equivocado? ¿Exagero? ¡YA ME GUSTARIA...pero el tiempo dirá quién tiene razón!