Muy atinada, Cristina, como siempre.
Recomiendo la lectura del libro de Victor Klemperer "LTI. La lengua del Tercer Reich. Apuntes de un filólogo".
La Lingua Tertii Imperii es un ejemplo histórico de cómo corromper la lengua en aras de una ideología y de la propaganda.
También tenemos un ejemplo de este fenómeno en la neolengua de la novela de Orwell "1984".
Más recientemente, el autor Johan Goldberg escribió un influyente libro titulado "Liberal Fascism" ("Fascismo progre"), muy bien glosado por Manuel Pastor en La Ilustración Liberal en este artículo, que recomiendo a los interesados:
http://www.ilustracionliberal.com/44/el-fascismo-p...
Llevará esposas y esposos, claro...
Cristina, una vez más le agradezco el placer de haberla leído y el regusto de meditarle. "Ya le han puesto el capirote a la Real Academia", aguda observación y acertada expresión (a toro pasado y rizando el rizo, sustituiría "capirote" por "capuz")
Kerkus, dando por entendido que los signos de interrogación que enmarcan su comentario quieren ser de admiración, me adhiero.
Con afecto.
"DICCIONARIO PROGRE. Aprenda a hablar como un progre en 10 días", Mario Flores. Editorial Jirones de Azul, Sevilla
Cristina : ¿Queremos un libro tuyo?
Excelente artículo.
Me ha recordado otro, también memorable, del citado Tom Wolf, <a href="http://www.letraslibres.com/revista/convivio/en-el-pais-de-los-marxistas-rococo">"En el país de los marxistas rococó"</a>, que he podido localizar en internet, del que copio y pego el siguiente párrafo:
<i>"Recientemente me encontré en una de nuestras principales universidades a una mujer que impartía un curso de Teoría Feminista y reprobaba a sus estudiantes si en un examen o un trabajo ponían 'women' como plural de la especie. Insistía en que se pusiera 'womyn', ya que las autoridades establecidas, en algún momento perdido en la bruma del pasado, habían integrado la primacía masculina en la lengua misma al hacer que la palabra women fuera 60 por ciento men. ¿Cómo reaccionaban los estudiantes? Se encogían de hombros. Han aprendido desde hace mucho tiempo lo fútil de oponerse al marxismo rococó. Simplemente ponen 'womyn' y siguen afanándose en conseguir el crédito de ese curso."</i>
Algunos ya tenemos un libro de Cristina: "Morfina roja"
Yo lo he comparado con "A sangre fría" de Dos Pasos por la adición que provoca su lectura, pero más auténtico, más riguroso.