La librería de viejo Brought to Book Ltd en Londres tiene a la venta un ejemplar de la primera edición (1913) de The Mystery of Dr. Fu-Manchu de Sax Rohmer. Su precio es de 1.000 libras esterlinas. Comenzaban las aventuras protagonizadas por Denis N. Smith, de Scotland Yard, y el doctor Petrie en su lucha contra el diabólico doctor, la mayor mente criminal después de James Moriarty. En 1959 se publicó la última novela, Emperador Fu-Manchú. Su acción se desarrolla en China.
En The Mystery…, Smith y Petrie evitarán que importantes científicos e ingenieros acaben secuestrados, tras ser sumidos en un estado de catalepsia. Llegarán a tiempo para salvar a Norris West —estadounidense inventor del aerotorpedo— y a lord Southery, el ingeniero más grande de su época. No así con Von Homber, científico alemán. Fu-Manchú, una "inteligencia perversa" que dispone de un terrible ejército secreto, el Si-Fan, intenta controlar las mentes más brillantes y acceder a sus secretos. Ha empezado su guerra contra Occidente.
Un siglo después… las actividades chinas de adquisición de talento siguen siendo de alcance y escala mundial, pero sin secuestros, ni pócimas que induzcan a la catalepsia. El embeleso está en la chequera. A finales de 2020, el físico cuántico español Carlos Navarrete, en unas declaraciones a El Mundo, explicaba cómo terminó, desde el prestigioso Instituto Max Planck de Alemania, en la Universidad Jiao Tong de Shanghái: "Había una plaza. Fui por probar. No pensaba aceptarla. La gente que trabaja allí es muy buena y no sólo me ofrecieron un sueldo mucho más alto sino que me dieron dinero suficiente para crear un grupo de investigación de 10 personas".
La Oficina del Representante Comercial de EEUU (USTR) tiene la responsabilidad de asesorar al Presidente en cuestiones comerciales. En marzo de 2018 elaboró un informe con las conclusiones de una investigación sobre las prácticas de China relacionadas con la transferencia de tecnología y la propiedad intelectual.
El documento advierte de que con "el apoyo de varios programas y entidades gubernamentales, en particular la Asociación China de Ciencia y Tecnología (CAS), empresas de la República Popular han atraído a los mejores talentos de compañías extranjeras pagándoles una remuneración muy superior a la del mercado". Y concluye que "estas actividades pueden constituir una transferencia de tecnología de Estados Unidos a China". Para el Partido Comunista Chino (PCCh) la propiedad intelectual es un concepto capitalista. La USTR destaca el robo de secretos comerciales y las infracciones cometidas por las entidades del gobierno de Pekín encargadas de la gestión de patentes.
Las empresas centrales (SOEs) son aquellas cuyos dirigentes los nombra el Consejo de Estado o el Comité Central del PCCh. En septiembre de 2022, la Comisión de Supervisión y Administración de Activos Estatales (SASAC) publicó una Directiva conocida como Documento 79. Su objetivo es acabar con el uso de tecnologías occidentales en sectores económicos estratégicos. Las SOEs deberán reemplazar todo el software extranjero para 2027. La campaña, según publicó The Wall Street Journal, "es conocida informalmente en China como Delete A, por delete America (borrar America)".
El 12 de junio de 2017, EFE informaba que Cosco Shipping Ports (CSP), cuarto grupo mundial en capacidad de contenedores y una de las tres grandes navieras bajo la dirección del PCCh, compraba el 51% de Noatum (primer operador de terminales portuarias de España) y pasaba a controlar la terminal de contenedores del puerto de Valencia, la del puerto de Bilbao y los puertos secos de Coslada (Madrid) y Zaragoza. COSCO es también el accionista mayoritario de un operador ferroviario y una empresa de ferrocarril, CSP Logitren. La terminal BEST, en el puerto de Barcelona, está gestionada por Hutchison Ports, otra empresa china. Según un informe de la consultora Alphaliner, Pekín tiene "inversiones en 31 terminales de contenedores en Europa", 27 de ellas en puertos de Estados de la UE. Para sus analistas, "la preocupación por el dominio chino de las terminales europeas no se centra tanto en el número de instalaciones, como en el grado de control individual". En España el grado de control es el máximo.
Ni la Estrategia de Seguridad Nacional (2021), ni el Marco Estratégico del sistema portuario (2022) mencionan la conveniencia de impedir inversiones en infraestructuras críticas portuarias por parte de empresas de Estados autoritarios, en este caso un régimen comunista. En junio de 2023, el canciller Scholz autorizó una entrada minoritaria de COSCO en la terminal Tollerort del puerto de Hamburgo. La decisión provocó tensiones en el Gobierno ya que, unos meses antes, la terminal había sido clasificada como infraestructura crítica por la agencia nacional de ciberseguridad de Alemania (BSI). Cuando COSCO desembarcó en los puertos españoles —junio de 2017— nosotros estábamos entretenidos con la convocatoria del referéndum ilegal del 1 de octubre y el debate de la moción de censura de Podemos contra Mariano Rajoy.
Sin hacer ruido "China está adquiriendo cada vez más acceso a las infraestructuras europeas y a sectores de vital importancia para la UE y ejerce influencia sobre ellos". Esta es la principal conclusión de la Resolución del Parlamento Europeo (P9TA 2024-0028 del 17 de enero), sobre las implicaciones en materia de seguridad y defensa de la influencia de China en las infraestructuras críticas en la UE. "La República Popular proyecta poder en el extranjero utilizando una red de puertos comerciales e instalaciones de doble uso que proporcionan apoyo logístico y de inteligencia a la marina china", se lee en el punto 31. "En dos puertos europeos, los buques de guerra de la Armada del Ejército Popular de Liberación han sido objeto de importantes labores de reparación o mantenimiento".
Según fuentes de toda solvencia, en la reunión a puerta cerrada que Pedro Sánchez mantuvo con el preboste chino, nuestro presidente le advirtió "con claridad y franqueza": "Mira ‘Sichinpin’, como me toques al gorrino ibérico hablo con Ábalos que sabe de puertos, le rehabilito, y los de COSCO salen por donde entraron". Parece que ‘Sichin’ arqueó la ceja como le ha visto hacer a su amigo Zapatero. No ignora que cuando Sánchez se pone farruco… cuidadito con él.